El partido republicano criticó este 11 de febrero la propuesta demócrata de ayuda por COVID-19 alegando que es demasiado costosa, económicamente dañina y abiertamente partidista.
Los republicanos buscan descarrilar la principal prioridad del nuevo presidente Joe Biden a medida que el proyecto comienza a avanzar en un Congreso que el Partido Demócrata controla sólo de manera limitada.
Cuatro comisiones de la Cámara de Representantes trabajaban en el proyecto, de 1900 millones de dólares y que contempla entregar cheques de 1400 dólares a muchos estadounidenses.
El plan también busca entregar cientos de miles de millones de dólares a gobiernos estatales y locales, impulsar esfuerzos de vacunación, aumentar créditos fiscales para familias con hijos y aumentar prestaciones por desempleo.
Asimismo, incluye un aumento del salario mínimo a 15 dólares la hora para todo el país, y más fondos para el cuidado infantil y la financiación de las escuelas.
Sobre el cheque de 1400 dólares por contribuyente incluido en el plan, los demócratas han expresado su intención de limitarlos a las familias de ingresos medios y bajos, mientras que los republicanos plantearon dejar fuera a los inmigrantes indocumentados, una enmienda que se aprobó con el apoyo de ocho legisladores demócratas.
Los líderes demócratas esperan que la cámara baja apruebe el paquete a finales de este mes. Con la ratificación del Senado, el proyecto de ley estaría en el escritorio de Biden a mediados de marzo.
“Este es el momento”, afirmó el presidente de la Comisión de Recursos y Arbitrios de la Cámara de Representantes, el demócrata Richard Neal, citando el costo humano y económico de la pandemia.
Durante los trabajos de las comisiones, los republicanos propusieron enmiendas, destacando lo que consideran puntos débiles de la propuesta. Entre varios señalamientos, dijeron que los demócratas gastan demasiado, perjudican a los trabajadores y la oferta laboral, son demasiado generosos con algunos inmigrantes, invitan al fraude y recompensan a sus aliados políticos, acusaciones que los demócratas tacharon de ridículas.
Las propuestas indican que el plan de Biden enfrenta una sólida oposición republicana en dos cámaras donde los demócratas tienen pocos votos de sobra, al tiempo que obligan a los demócratas a tomar posiciones que podrían darles material de ataque político a los republicanos en sus anuncios de campaña para las elecciones de 2022.
El proyecto de ley debe ser desarrollado y redactado en detalle por varios comités del Congreso, con lo que, pese al carácter de urgencia que Biden ha dado a este plan de estímulo, este proceso pudiera aún tardar varias semanas.