La Fiscalía General de Colombia investiga la misteriosa muerte del italiano Carmine Mario Paciolla, quien habría llegado al país como un voluntario de la Misión de Verificación de los acuerdos de paz de Naciones Unidas en Colombia.
El cuerpo del italiano de 33 años, fue encontrado el miércoles 15 de julio en su lugar de residencia en el municipio de San Vicente del Caguán, Caquetá; zona que históricamente ha sido controlada por las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Para la Policía colombiana, se tiene como hipótesis inicial que se trata sobre un caso de suicidio, sin embargo, todavía no hay un resultado que confirme la causa de muerte.
De acuerdo con sus compañeros de trabajo, quedaron de encontrarse en la mañana de aquel miércoles para iniciar labores, pero que Paciolla nunca llegó. Por esta razón, se desplazaron hasta su lugar de residencia.
Al llegar a la casa y tocar la puerta en repetidas veces, Paciolla “no abrió, por lo que le pedimos a la persona que le arrendaba el apartamento que abriera, ya nos empezábamos a preocupar. Y fue así como lo encontramos muerto, y de inmediato se llamó a la policía”, explicó uno de los testigos.
Después de descubrir el cuerpo, las autoridades colombianas llegaron al lugar de los hechos, procedieron a hacer el levantamiento del cadáver, embalar las evidencias y algunos elementos encontrados en el lugar, asimismo, inició con el interrogatorio a los amigos y personas cercanas.
Según la persona que le arrendó la vivienda a Paciolla, afirmó que la noche anterior a su muerte, el voluntario de la ONU estaba teniendo una conversación algo exaltado a través de su celular entre las 10 y 11 de la noche. No obstante, no logró identificar sobre qué hablaba, ya que lo hacía en italiano.
El cadáver del italiano fue trasladado hacía el municipio de Florencia, Caquetá, donde se encuentra ubicada la sede de Medicina Legal, para que se le practicará la necropsia y esclarecer las circunstancias de su muerte.
Este caso ha generado una tensión binacional entre Colombia e Italia, pues desde Nápoles, la familia de Paciolla y autoridades rechazan la versión del suicidio, y afirman que la muerte del italiano se produjo por otras circunstancias.
El alcalde de Nápoles, Luigi de Magistris, se reunió con Anna Motta, madre de Paciolla, quien aseguró que su hijo estaba "preocupado por algo que había visto, oído o intuido", por lo que tenía previsto adelantar su viaje a Italia, justamente para el día en que fue encontrado muerto.
Luigi Di Maio, ministro del Exterior italiano, aseguró que no se escatimarán “esfuerzos para arrojar luz sobre esta trágica historia, existe el mayor compromiso de mi parte y de la Cancillería" para descubrir la verdad sobre la muerte de un "joven brillante y comprometido en una misión muy delicada", indicó la AFP.
El cuerpo de Paciolla ya se encuentra en Bogotá y en las próximas horas será repatriado a Italia, aseguró El Tiempo. Además, una fuente del alto gobierno les informó que el caso “es un tema muy delicado, porque se trata de un ciudadano extranjero, funcionario de las Naciones Unidas, por eso, la información se está manejando con mucho cuidado, y es un tema a cargo de la Cancillería”.
