El alcalde de Miami, Francis Suárez, entregó este viernes las llaves de la ciudad a Fabiana Rosales, la esposa del líder opositor venezolano Juan Guaidó, y otro juego para éste, en un acto en el que puso de relieve su confianza de un pronto retorno de la libertad en Venezuela.
"La ciudad de Miami está con ustedes", le dijo el alcalde Suárez a Rosales durante un acto celebrado en la residencia privada de la empresaria y filántropa Adrienne Arsht, en la que puso de relieve la figura de Guaidó como la imagen de un "ciclo de paz" y de "entendimiento mutuo".
"La paz y el amor serán restaurados, y la democracia prevalecerá", señaló Suárez, quien antes lamentó que por culpa de "un cobarde que se esconde detrás de un Ejército", en velada alusión al gobernante Nicolás Maduro, el pueblo venezolano "ha sido privado de sus derechos y libertades".
"Confío que pronto Venezuela será libre" y que Juan Guaidó "traerá paz a sus ciudadanos", manifestó el alcalde de Miami, ciudad que ha reconocido al líder opositor como presidente interino del país latinoamericano, al igual que medio centenar de países.
Guaidó, jefe de la Asamblea Nacional, participó del acto a través de una llamada telefónica en la que agradeció la entrega de las llaves de la ciudad.
"Que Dios los bendiga a todos ustedes", señaló vía telefónica.
Fabiana Rosales agradeció al alcalde por el reconocimiento, pero se confesó "más agradecida por lo que están haciendo por los venezolanos" los líderes de varios países.
"Cada pronunciamiento, cada mensaje, cada ayuda hacia el pueblo venezolano es un acto de humanidad", dijo Rosales, quien resaltó que la "causa de Venezuela" va más allá de una ideología política, religiosa o social, y que ha trascendido naciones.
"Queremos salvar vidas", destacó sobre el objetivo en común que ha unido a diferentes Gobiernos que se han manifestado a favor de la restauración de la democracia y libertad en el país latinoamericano.
Durante el acto, Suárez leyó unas palabras del discurso de Václav Havel al papa Juan Pablo II cuando lo recibió ya como presidente de Checoslovaquia y le dijo al líder de la Iglesia católica que creía que su presencia ante él era un "milagro".
El alcalde de Miami trajo a colación esa anécdota para hacer un paralelismo con el surgimiento de Guaidó en Venezuela.
Suárez entregó a Rosales también un cuadro elaborado por la activista y exiliada cubana Ninoska Pérez Castellón, que retrata a la Virgen de la Caridad del Cobre (patrona de Cuba) con la bandera de Venezuela en el cuello, en representación de la diáspora de este país en Miami.
Rosales tiene previsto participar mañana sábado en un acto de recolección de fondos a favor de Venezuela que se celebrará en Doral, ciudad aledaña a Miami, y al día siguiente visitará la capilla Caridad del Cobre para luego sostener un encuentro con la comunidad venezolana.