En un hecho sin precedentes, Félix González murió de hipotermia la mañana de este jueves en la ciudad de Caibarién, en la provincia de Villa Clara, en el centro de Cuba, debido a las bajas temperaturas que se han experimentado en la región central y occidental del país en las últimas horas.
González, de 54 años, vivía en Remate de Ariosa, en la misma provincia, y según las primeras pesquisas, él quedó a la intemperie y profundamente dormido presuntamente por ingerir bebidas alcohólicas profusamente, de las que era asiduo consumidor. De hecho, se sabe que había pasado borracho los últimos días.
El cuerpo sin vida de González fue avistado por trabajadores en su mayoría del Servicupet Oro Negro de esa localidad, quienes dieron aviso a las autoridades.
El cadáver quedó protegido solo a medias por el caparazón de concreto del Cangrejo, escultura localizada a la entrada de Caibarién.
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El fallecido vivía con sus dos padres, quienes, por su avanzada edad y según dijeron en la funeraria donde se encuentra el cadáver de González, “nunca sabían por dónde andaba el hijo cada vez que una crisis recurrente le atacaba”.
Las temperaturas de los dos últimos días en la región central del país han roto records históricos para el mes, y en Caibarién, lugar del deceso, y la noche del miércoles ya registraban 14 grados Celsius, y en la madrugada descendieron hasta 11.
No existen hasta hoy registros ni noticias de fallecimientos anteriores en la región central por hipotermia.