Lianet Gelme tiene 25 años y vive en Baire, municipio Contramaestre, en Santiago de Cuba, junto a sus dos hijos pequeños y su padre, el opositor y miembro de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), Andrés Manuel Gelme.
Uno de sus hijos fue diagnosticado con epilepsia y tiene una malformación en el labio inferior a causa de esta enfermedad, pero las autoridades cubanas no la atienden ni se fijan en ella porque su padre es opositor al régimen.
Desde que su hijo comenzó a tener problemas, Lianet tuvo que dejar los estudios y el trabajo para atenderlo. El pequeño no se vale por sí mismo y depende de la madre. “Fui con la trabajadora social, cuando él estaba grave en terapia, a pedir ayuda, y me dijeron que había personas más necesitas que yo”, declaró Lianet a ADN CUBA.
La casa de la familia es un tugurio con paredes de zinc y techo de guano y madera. Viven así desde el 2012, cuando el huracán Sandy destruyó lo que tenían. Luego, entre ella y su padre armaron el lugar donde viven, “como pudieron”.
Según Lianet, la Seguridad del Estado ha ido a la casa con el propósito de sonsacarlos. Les prometieron ayuda para encontrar trabajo si ella convencía a su padre de abandonar la UNPACU, pero dijo que él tenía derecho a pensar como pensaba.