El gobierno estadounidense aseguró este lunes que no romperá relaciones diplomáticas con el régimen de La Habana.
Un funcionario del Departamento de Estado de EEUU en la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, comentó a Radio y Televisión Martí que "“no hay planes para romper los lazos diplomáticos en este momento".
El portavoz norteamericano también criticó la represión constante del gobierno de Cuba contra su pueblo y la presencia de este en otros países de la región.
Consultado por ese medio sobre un eventual avance en las relaciones entre ambas naciones, el vocero expresó que solo sucedería "si el gobierno cubano toma medidas reales para permitir voces disidentes, respetar los derechos de su pueblo y poner fin a sus actividades malignas en la región",
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Por su parte, el director general para Estados Unidos de la cancillería cubana, Carlos Fernández de Cossío, aseguró a AFP que Cuba "está lista" para romper relaciones con Estados Unidos, pero "no lo deseamos".
"Nos consta que el empeño de ellos es romper todos los lazos existentes, cerrar las embajadas", reabiertas en 2015 cuando La Habana y Washington restablecieron sus relaciones diplomáticas, interrumpidas en 1961.
Y "estamos listos, preparados para una eventualidad como esa, que no procuramos nosotros, no la deseamos", afirmó el diplomático.
El 17 de diciembre de 2014, cuando Barack Obama y Raúl Castro anunciaron el histórico acercamiento entre los dos antiguos enemigos de la Guerra Fría, Fernández de Cossío, entonces embajador en Sudáfrica, estaba de vacaciones en la isla.
Cinco años después tiene un "balance contradictorio" del camino recorrido.
"Durante los últimos tres años ha habido una erosión progresiva, hasta que hemos llegado al momento actual, en el que el gobierno de Estados Unidos claramente declara su propósito agresivo contra Cuba", declaró Fernández de Cossío.
