El joven locutor y presentador de televisión Carlos Alejandro Sánchez Rodríguez es otro de los comunicadores vinculados a medios estatales cubanos que recientemente han llegado a los Estados Unidos .
“Miami, aquí estoy…”, fueron las palabras publicadas por Carlos Alejandro en su Instagram, que tiene casi 35 mil seguidores. El locutor, de 24 años, se ha mantenido en el sur de la Florida disfrutando de paseos que comparte en sus redes sociales.
Carlos Alejandro Sánchez Rodríguez estudió Lenguas Extranjeras en la Universidad de Camagüey. Trabajó en las emisoras estatales Radio Cadena Agramonte y Radio Camagüey.
Con la llegada de la COVID-19 a la isla, condujo una revista informativa sobre la pandemia en el canal de televisión local, donde trabajaba desde 2014 en varios espacios juveniles. Allí recibía a funcionarios del gobierno para explicar a la población las orientaciones del régimen para frenar el avance de la COVID-19.
En una entrevista con la revista estatal Alma Mater, Carlos Alejandro Sánchez citó como fuentes verídicas a medios que normalmente hacen propaganda de regímenes autoritarios: “Continuamente reviso las informaciones de portales digitales como Cubadebate, Prensa Latina, TeleSur, Rusia Today (…) es preciso aprender a discernir la información verídica de las fake news, por lo que soy cuidadoso a la hora de consultar información que no provenga de instituciones de prensa oficiales”.
Esta semana, también llegó a los Estados Unidos el locutor y presentador de la televisión estatal de Cuba Alejandro Quintana Morales, tras un viaje como migrante irregular de Nicaragua a Miami.
“Soy uno más de este éxodo masivo sin remedio y sin opciones. (…) Sí, soy uno más, porque mi historia se parece a la de muchos o tal vez a la de todos, pero no, tú sabes que nadie me regaló una visa, nadie me abrió las puertas de un avión ni tendió para mí una alfombra roja”, declaró Quintana el martes en su perfil de Facebook.
“Sí, soy uno más de los que entregaron su arte en tus medios porque nunca me dejaron ver en ti algún otro. Sin embargo, sabes que no fui de los que engolaron la voz para convencer más, para imponer más ni para intimidar más”, agregó, aparentemente para poner distancia entre su trabajo y el de voceros gubernamentales.
En los últimos meses, al éxodo de cubanos hacia Estados Unidos y otros países se han sumado trabajadores de los medios estatales de comunicación, como Sánchez y Quintana, además de la periodista y directora de programas informativos Yailén Insua Alarcón, que pidió asilo en Colombia, y el presentador y locutor Frank Abel Gómez, que ingresó a EEUU.
El caso más polémico ha sido el del comentarista oficial Yunior Smith Rodríguez, quien renegó la semana pasada del régimen cubano después de servirle de vocero en varias campañas contra opositores pacíficos y a favor de la represión. El analista internacional y periodista de la estatal Televisión Cubana confirmó en sus redes sociales que estaba camino a la frontera de EEUU con México con el propósito de emigrar de manera permanente, porque se cansó del régimen y de “aquella mierda putrefacta”.
