Más de 4500 firmas online han pedido a la Alta comisionada de Derechos Humanos de la ONU, Michele Bachelet, una investigación sobre las muertes no aclaradas de los disidentes cubanos Oswaldo Payá y Harold Cepero, miembros del Movimiento Cristiano Liberación.
La petición, firmada por el hermano del fundador del Proyecto Varela y del Movimiento Cristiano Liberación, Carlos Payá Sardiñas, denuncia el fallecimiento de ambos opositores en circunstancias aún no aclaradas en fecha 22 de julio de 2012 en la provincia de Granma, presuntamente como consecuencia de un “accidente automovilístico”, según la información pública de las autoridades del Estado de Cuba.
"Ninguno de los miembros de nuestra familia ha tenido acceso al expediente realizado por autoridades policiales y judiciales relacionado con el fallecimiento de Oswaldo. Desconocemos la real causa de su muerte según el contenido del protocolo de autopsia forense, los detalles del sitio del suceso y demás evidencias recolectadas y analizadas durante el proceso penal, o si intervinieron otros automóviles durante el evento", escribe el denunciante.
"Durante el desarrollo del proceso, no le fue permitido a la familia asistir a las vistas del juicio, ni incorporar la evidencia de que disponemos para esclarecer los hechos, y menos aún, contar con la intervención de asesores legales y expertos forenses que representaran los derechos e intereses de la familia como víctimas indirectas. Tales restricciones generan graves dudas respecto a objetividad e imparcialidad de las autoridades involucradas en el caso. Tal opacidad ha sido el mecanismo de la injusticia", añade Payá Sardiñas.
"Ruego a usted, honorable Alta Comisionada, que interceda con el Estado de Cuba para lograr en primer término que la familia pueda acceder a las actas procesales, evidencias del caso y, de igual forma, se realice una investigación transparente, objetiva e imparcial de los hechos y circunstancias, en donde participen expertos internacionales y expertos designados por la familia. Esta sería la única forma de llegar a la verdad por las vías jurídicas idóneas y confiables", concluye la petición.
Entre las firmas que reclaman la investigación hay cientos de apoyos desde Cuba, escritos a mano, puesto que el régimen cubano tiene bloqueado en la isla el acceso a la plataforma Change.org.