El director de cine Léster Hamlet Veira Rodríguez denunció este miércoles 24 de agosto en Facebook que el régimen le prohíbe la entrada al país en los próximos cinco años.
“Antier por la mañana recibí una llamada del departamento de Protocolo del ICAIC para hacerme saber que, por no haber regresado a la isla en tiempo -un tiempo determinado por ellos- se me ha aplicado una sanción que me impide regresar a Cuba en los próximos cinco años” anunció Veira Rodríguez en la citada red social.
Según refiere el realizador cubano se le “enredaron los pensamientos ante la arbitrariedad de la llamada, sanción que en realidad es un destierro anunciado”.
En su post, Veira Rodríguez reconoció que “no quieren en casa a quienes tengamos ideas diferentes en lo que respecta a libertad y patria” pues, según refiere, lo ha visto “en muchas ausencias impuestas” porque “se sienten los dueños de tu vida”.
“A partir de la conciencia de ser "distinto" a ese proyecto, acepto con honra el regalo y me aventuro a reiniciar mi vida en otro lugar, a mis 51 años, lleno de ilusiones nuevas y bajo el impacto de conocer el destierro en primera persona. Sólo deseo agradecer la oportunidad a la que me obligan, aun cuando no era un plan en mi cabeza, sobre todo por los vínculos afectivos que me unen a ese espacio del que ahora no me permiten formar parte” refirió el cineasta.
En su publicación, el director forzosamente exiliado anunció que “esa sociedad quebrada continúa su camino hacia la mediocridad más absoluta” y lamentó “no poder ser testigo directo de su inminente fin”, pues anhelaba “experimentar junto a mis coterráneos la alegría de saberse libres”.
Por último, Veira Rodríguez se mostró esperanzado de que “mucho antes de 5 años, toda esa estupidez que acompaña a la dictadura habrá desaparecido” y aseguró que no tenía la menor duda al respecto.
El cineasta cubano recibió muchos mensajes de apoyo. Usuarios como Jordanis Guzmán Rodriguez se reconocieron “confundido(s) y muy contrariado(s) por tan arbitraria medida” al considerar que “nos están dejando sin el alma de este país, que es la gente que hace y vive para la cultura”.
Por su parte, el actor Waldo Franco lamentó: “no basta con que se desangre de artistas el país, ahora los deportan cínicamente, están creando el caldo de cultivo para la mediocridad y el oportunismo (...) el talento no importa, si piensas igual que ellos, paso a la decadencia”.
