La deficiente atención médica es un problema que afecta a todos los cubanos, pero para los que viven en zonas rurales la situación se ha agudizado en los últimos años.
El transporte especializado que nunca llega, la falta de insumos médicos, la escasez de personal... son algunos de los graves problemas que pueden costar la vida a los pacientes de estas zonas intrincadas.
ADN CUBA ha entrevistado a una de esas personas, el técnico en Contabilidad Vladimir Lao Ferrá, actualmente a cargo de su padre, luego que éste sufriera una embolia.
Lao Ferrá se queja de que al municipio pinareño de San Juan y Martínez, donde reside, no llegan las visitas de los médicos. "A veces no ha habido medicamentos y no ha habido equipos de sueros, ni jeringuillas desechables, ni reactivos para análisis urgentes, faltan muchas cosas", dice.
"Más de la mitad de los medicamentos para personas que padecen enfermedades crónicas no entran al municipio pinareño", denuncia Ferrá.
Los casos de negligencia médica también han golpeado a esta familia: la suegra de Ferrá se quedó ciega por un mal diagnóstico de glaucoma y su padre, tras una hemrragia cerebral, quedó hemipléjico y semi abandonado tras una rehabilitación deficiente.
La mayoría de las veces escasean las ambulancias, el municipio tiene sólo una y los enfermos deben pagar su transporte hasta el hospital, cuenta a ADN Cuba.
"No me he planteado denunciar esto porque a ellos no les importa ni les interesa nada", concluye Ferrá.
