El régimen cubano usará drones para mejorar la producción de caña de azúcar durante la zafra 2021-2022, informaron medios estatales.
El Grupo Empresarial Geocuba, perteneciente a las Fuerzas Armadas, realiza estudios en plantaciones cañeras “con el empleo de tecnologías de avanzada (drones con cámaras de imagen real y multiespectrales, e instantáneas satelitales)”, que “favorecerán el desarrollo de la zafra azucarera 2021-2022 en la Empresa Agroindustrial Ciro Redondo” en Ciego de Ávila, afirmó la Agencia Cubana de Noticias (ACN).
Con el uso de drones determinan el estado de los cultivos, llenos de bejucos que dificultan los cortes mecanizados y manuales, según dijo Homero Menéndez Pérez, director de la Agencia de Teledetección de Geocuba.
Luego de detectar la maleza, se previó la fumigación con el empleo de drones para “humanizar” las labores en los campos, añadió Menéndez Pérez.
Geocuba trabaja con el Grupo Empresarial Azcuba, monopolio estatal de la industria azucarera, en la reorganización de sus plantaciones de caña.
El directivo explicó que un monitoreo mediante imágenes satelitales ayuda a determinar la cantidad de caña, su maduración y el momento más adecuado para los cortes, lo cual permitiría aprovechar mejor las áreas cultivadas.
La Unión Agropecuaria Militar de Ciego de Ávila recibirá una asignación de drones para sustituir las fumigaciones con tractores, lo que evitará la compactación de los suelos y los daños provocados a las plantaciones por maquinarias pesadas, aseguró Menéndez Pérez a la ACN.
Los drones son capaces de rociar hasta tres hectáreas por vuelo, además de ahorrar fertilizantes, minimizar los perjuicios al medio ambiente y evitar afectaciones a campos colindantes, dijo el director de la agencia de Geocuba.
Industria azucarera en crisis
A finales diciembre el medio independiente El Espirituano informó que trabajadores del central azucarero “Uruguay”, en el municipio Jatibonico “viven en incertidumbre e inseguridad económica” por la escasez de materia prima para la zafra.
La falta de caña de azúcar para moler obligó a los directivos de Azcuba en ese territorio, a posponer el inicio de la zafra en el ingenio, uno de los más grandes de la provincia Sancti Spíritus y el país.
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La medida tomada por las autoridades del monopolio estatal afectó a los trabajadores, quienes deberán enfrentar un prolongado “tiempo muerto” y un golpe directo a sus economías personales y familiares, informó la reportera ciudadana Lian Lisset Rodríguez, en la nota reproducida por el Instituto Cubano de Libertad de Prensa y Expresión.
Según Gonzalo Ríos, directivo del central afectado, la zafra se iniciaría solo en el ingenio “Tuinicú”, pues el volumen de la caña es poco para abastecer a las dos fábricas. De esta manera se dejarán de moler unas 25 mil toneladas, refirió El Espirituano.
“Qué nos vamos a hacer, la zafra es el único empleo disponible, y cuando único cobramos algo de dinero. La vamos a pasar muy mal”, lamentó el obrero Luis Guerra.
“Nos vamos a crecer este año, porque para salvar la industria hay que recabar de la vergüenza de los colectivos azucareros”, dijo el 23 de noviembre Jorge Luis Tapia Fonseca, viceprimer ministro, en la Estación Experimental Provincial de la Caña de Azúcar, en el municipio Jovellanos, Matanzas.
Tapia insistió en que “hay que pagarle más a quienes producen”, pero “lo más importante es hablar con los trabajadores azucareros sobre las difíciles condiciones en que el país realizará esta zafra”.
En 2021, de acuerdo con cifras oficiales, la agroindustria tocó fondo al producir poco más 800 000 toneladas de azúcar sin refinar, la más baja desde 1908.
“La industria más o menos se ha derrumbado. La situación es peor este año que el pasado y tomará tiempo revertirla”, dijo un experto local a la agencia de noticias Reuters.
Advirtió que Cuba podría quedar en 2022 por debajo de la producción del año anterior. Para revertir la situación, el especialista consultado por Reuters recomendó “ir más allá con las reformas, atraer inversión extranjera o desviar dinero de otros sectores, como el turismo”.