Una doctora cubana, oriunda de Mayarí en Holguín, se habría fugado de la “misión médica” que el régimen envió a México para combatir la COVID-19, según informó Diario de Cuba.
Según ese mismo reporte, la doctora de Mayarí, se suma a un total de 15 personas, que igualmente pertenecían a dicha “brigada” y que han huido hacia paradero desconocido.
No obstante, el régimen de la Isla, no ha confirmado las “bajas” en ninguno de los casos que anuncia Diario de Cuba. Algo muy habitual en las fuentes oficiales de la Isla.
Según la fuente que utiliza el Diario, “la doctora es natural de Mayarí, municipio de la provincia de Holguín, y formaba parte del grupo de al menos 590 profesionales que el gobierno cubano exportó a México a fines de abril”.
Otras cifras, aportadas por la agencia EFE, arrojan más de 800 profesionales cubanos laborando en territorio azteca.
Esa misma fuente habría asegurado que “se han producido alrededor de 15 fugas (…) y el grupo trabaja sobre todo en Ciudad de México y su zona conurbana, donde está el epicentro de la enfermedad en ese país”.
La labor de los médicos cubanos en México ha sido muy cuestionada por sus colegas mexicanos que sí están en la primera línea de fuego del COVID-19.
Un doctor mexicano que trabaja en el Hospital General Balbuena mencionó en el diario azteca “El Universal” que se preguntaba todos los días qué hacen los médicos cubanos allí.
“La verdad es que nada más están aquí para tomar muestra. ¿Asesoría? Pues no sabemos de qué tipo, porque son médicos familiares de primer contacto, son sanitaristas”, dijo.
Según dicho diario mexicano, en ese hospital hay alrededor de 18 médicos cubanos que llegan a diario en un transporte que les fue proporcionado por el Gobierno de Ciudad de México que los traslada del sitio donde se hospedan, al hospital y viceversa.
Según la Secretaría de Relaciones Exteriores los especialistas cubanos no prestarían servicios médicos directos a la población mexicana y puntualizaban “vienen a dar únicamente recomendaciones en materia de política pública”. ¿Más de 800 personas para eso?
Varias denuncias, por parte de médicos mexicanos, hablan de que los enviados por el régimen estarían ganando “cuatro veces más” que un médico de ese país, que labora en la primera línea de combate contra la COVID.