La empresa de reservas de plazas hoteleras Trivago eliminó de su plataforma de búsqueda un paquete de hoteles en Cuba tras el cambio normativo promovido por el gobierno de Estados Unidos hace unos meses y la demanda que fue presentada contra la firma este verano, en virtud del título III de la Ley Helms-Burton.
La resolución de la compañía que evalúa y compara precios y calidad de los alojamientos, llega luego de que Miami Rivero Mestre LLP presentara una demanda en su contra en junio pasado.
Grandes hoteleras españolas que operan en el país caribeño han comenzado a notar los problemas derivados de este cambio y anunciaran a sus accionistas posibles daños de cara al cierre de su ejercicio fiscal.
La cadena mallorquina Meliá, por ejemplo, una de las que más hoteles tiene en la Isla, es de las que perdió visibilidad para sus establecimientos a través de Trivago. La empresa advirtió que sus destinos más afectados por la medida son Holguín, Cayo Largo y La Habana, tres de las zonas más frecuentadas por los turistas que viajan a Cuba.
También en la capital cubana Trivago dejó de ofrecer una de las instalaciones insignia de la Isla, el Tryp Habana Libre. De propiedad estatal, fue en su momento la gran obra cubana de la empresa Hilton, hasta que Fidel Castro lo confiscó tras su llegada al poder.
En su último informe trimestral, Meliá anunció que "se espera el impacto de las recientes decisiones de Trivago de retirar un grupo numeroso de hoteles de Cuba de sus canales de venta", según reporta el diario La Información.
La cadena aseguró que "todas estas circunstancias apuntan a una reducción del ingreso por habitación disponible de un dígito medio comparado con el año anterior".
La situación también se ha extendido a otras firmas del sector, como Iberostar o Barceló, que junto con Meliá administran el 70% de las habitaciones de la Isla.
Las empresas españolas están a cargo de la explotación de las instalaciones hoteleras, cuyos propietarios mayoritarios son los militares cubanos a través del conglomerado empresarial GAESA, contra el cual van dirigidas la mayoría de las sanciones dispuestas por el Gobierno de EEUU en los últimos meses.