Yunany Morales González, enfermero cubano y participe de la Misión Médico Cubana en Venezuela, fue expulsado del país por “cuestionar constantemente a dirigentes” de Cuba en su cuenta de Facebook.
Según el propio enfermero, la sanción implica que pierde el 50% de lo acumulado durante el tiempo que trabajó en la misión y en Zona Roja de COVID-19, en el estado Táchira en Venezuela.
La resolución 5/2021 a la que tuvo acceso CiberCuba, dijo que Morales González recibió una denuncia por parte del responsable del Centro Diagnóstico Integral (CDI) El Piñal, donde decía que habría incurrido en “indisciplinas graves al realizar publicaciones contrarrevolucionarias que difaman sin escrúpulos nuestra revolución”.
Esto representaría una violación del derecho a la libertad de expresión que está garantizado en el artículo 54 de la Constitución de Cuba, aprobada en 2019, donde afirma que “el Estado reconoce, respeta y garantiza a las personas la libertad de pensamiento, conciencia y expresión”.
Adrián Rodríguez Santana, responsable de la Misión Médica Cubana en Táchira, indicó que Morales involucró a la propia misión en sus comentarios publicados y asegura que los colaboradores cubanos no se pueden quejar.
Según el responsable, las publicaciones “empañan el prestigio de la noble tarea” que ejercen los médicos cubanos fuera de Cuba.
“Se pudo comprobar a través de capturas a su perfil en las redes sociales (Facebook) tres publicaciones de carácter contrarrevolucionario”, indica la resolución.
Asimismo, compañeros colaboradores han señalado que Morales “expresa su sentir y su desagrado con ideas contrarias a la revolución” y cada uno de ellos estuvo a favor de su expulsión de la misión en Venezuela.
Por otro lado, el funcionario que sanciona al enfermero dijo que no tuvo objeciones con el trabajo de Morales y que siempre “ha cumplido cabalmente con sus guardias, entrando en Zona Roja para el tratamiento de pacientes con COVID-19”.
Sin embargo, la resolución indica que su increíble labor como enfermero fue “opacada por sus criterios políticos, por los cuales se le llamó la atención en varias ocasiones”.
Morales declaró ante CiberCuba que ahora le toca lidiar con la incomodidad y el disgusto de su familia. Estarían molestos “por no poderme callar”.
“Yo tengo 4 hijos en Cuba. Llevo aquí (en Venezuela) 30 meses y el convenio son 24 (…) Cociné con leña pues no surten gas; además, que en esa casa la cocina era de una vecina y las bombonas. Pagamos agua, el CDI ahora está en reparación; llovía más adentro que afuera; teníamos que limpiar en ocasiones el puesto de trabajo porque tenían solo 2 auxiliares que trabajan por turnos y el día que no iban asumíamos nosotros”, se quejó Morales.
El enfermero también dijo que le tocará llegar a Cuba y revisar su banco para ver para qué le alcanza el dinero depositado.
Hace una semana, el Parlamento Europeo aprobó una resolución en la que se condena las condiciones de esclavitud a las que están sometidos los médicos de la Isla de misiones en el exterior.
