Durante una transmisión del programa de la cadena Univisión El gordo y la flaca, el productor, quien acaba de lanzar el sencillo ‘One World, One Prayer', escrito por él e interpretado por The Wailers con la colaboración de Farruko, Shaggy, Skip Marley y Cedella Marley como homenaje a Bob Marley, habló de lo que le espera a la industria restaurantera y hotelera en Estados Unidos, toda vez que todo vuelva a la normalidad.
Emilio y Gloria Estefan enfrentan la pandemia de coronavirus que mantiene azotado al mundo pensando además en el bienestar de las cientos de familias que dependen de ellos dos para poder llevar el pan de cada día a sus mesas.
Más de 300 empleados que son un eslabón fundamental en el funcionamiento de sus empresas, han perdido la posibilidad de generar ingresos ya que están cerradas por ordenanzas del gobierno local que ha solicitado el cierre temporal de muchos negocios no esenciales para evitar la propagación del COVID19 en innumerables ciudades de los Estados Unidos.
Con esta medida, la famosa pareja se vio obligada a cerrar varios de sus empresas ubicadas en la Florida, entre las que sobresalen sus restaurantes y hoteles.
El empresario comenta haber ofrecido alimentos a los más vulnerables con esta realidad al tiempo que envió un mensaje de simplicidad y ayuda a los prójimos mencionando que los latinos van a jugar un papel fundamental en la ayuda y la recuperación de Los Estados Unidos. Para Emilio ésta es la oportunidad que tienen los latinos de demostrar que son parte de este país, que pueden ser ejemplo de disciplina al acatar todas las recomendaciones que hacen las autoridades de quedarse en casas y así evitar la propagación.
“En este momento no hay diferencia entre latinos, americanos, afroamericanos, todos somos seres humanos. Tenemos que luchar y enseñarle al mundo que ya seas pobre, rico, de un país u otro, cuando pasen estas cosas negativas debemos unirnos para salir Adelante. Yo soy una persona que tuve que dejar a mi familia, a mi madre, a mi abuelo que nunca más vi, cuando me fui a España. Allá estuve desamparado y para comer tenía que ir a una iglesia. Un día saliendo de la iglesia dije que en mi vida debería de ser positivo y no quejarme y luchar por los sueños”, recordó el reconocido músico y Persona del Año de la Academia Latina de la Grabación
