El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, aseguró este lunes que el organismo rector del fútbol mundial busca iniciativas, como la reducción de torneos y partidos, para salvar a la industria de este deporte de una crisis financiera.
Ante la cancelación de todos los grandes eventos del fútbol mundial, incluyendo la Eurocopa y la Copa América de naciones, el titular de FIFA sugirió que dar “un paso atrás” podría evitar el colapso total del fútbol organizado con la expansión del COVID-19.
“Quizás menos equipos, pero más igualados. Menos partidos, pero más competitivos, para proteger la salud de los jugadores”, explicó al diario italiano Gazzetta dello Sport. “Se necesita tener una evaluación del impacto global”, añadió.
Antes de que la pandemia del coronavirus se extendiese por el planeta, la administración que dirige Infantino había ampliado el formato de la Copa Mundial de 32 a 48 selecciones a partir de la edición de 2026, así como lanzó un Mundial de Clubes con 24 participantes, previsto para el año próximo.
Sin embargo, como reconoció el presidente, el estreno de este último deberá esperar, pues la recolocación de la Eurocopa y la Copa América para el verano de 2021 limitaría el número de fechas de partidos internacionales a partir de este año.
Según ha trascendido en la última semana, los principales miembros de la multimillonaria industria del fútbol presionan a FIFA para que halle pronto una solución que favorezca a los clubes de las ligas domésticas europeas, lo cual envía a un segundo plano a las competiciones de selecciones nacionales.
“No es ciencia ficción. Hay que debatirlo”, dijo Infantino este lunes sobre la posibilidad de cambios drásticos en el calendario. “No sabemos cuándo volveremos a la normalidad”.
La FIFA anunció en febrero pasado la creación de una fuerza de tarea especial compuesta por miembros de federaciones, clubes, ligas y sindicatos encargados de confeccionar un nuevo calendario internacional a partir de 2024. La pandemia del coronavirus ha puesto presión sobre el trabajo de este colectivo, al restringir aún más el apretado calendario del fútbol mundial.
Sin embargo, Infantino recordó la necesidad de las competencias internacionales para el desarrollo de este deporte: “Sin estos torneos, en cientos de países no existirían campeonatos, ni canteras, ni fútbol femenino, ni campos. Retrasar el Mundial de Clubes provoca una pérdida de cientos de millones a la FIFA y a todas las federaciones”, explicó el directivo.
El mensaje general del presidente en su entrevista es que esta crisis debe ser el comienzo de una nueva era en el fútbol mundial. Por ello, advirtió que este año las regulaciones sobre los ingresos y demás movimientos financieros de federaciones y clubes serán más estrictas.
“El fútbol no puede ser una Lejano Oeste donde no existen las reglas. El reglamento sobre los agentes es solo parte de una reforma más amplia del sistema de traspasos”.
