La Fundación Oswaldo Cruz (Fiocruz), el principal centro de investigación en salud de Brasil y el mayor de América Latina, inició la construcción de un hospital de campaña en Río de Janeiro para el tratamiento de pacientes críticos y la definición de protocolos que ayudarán a combatir la pandemia de la COVID-19 a nivel nacional.
La unidad, de la que ya se iniciaron las obras, reforzará la labor de por lo menos diez hospitales de campaña para pacientes con COVID-19 anunciadas por las autoridades de Río de Janeiro, el segundo estado de Brasil con mayor número de contagiados con el nuevo virus.
El "Centro hospitalario para la pandemia de la COVID-19 - Instituto Hospitalario de Enfermedades Infecciosas", como la Fiocruz bautizó su unidad, será un centro de referencia para el tratamiento e investigación del nuevo virus en Brasil.
Esto porque en la unidad, además de atender pacientes graves, también se adelantarán los ensayos clínicos contra la COVID-19, con los que Fiocruz busca verificar la efectividad de cuatro tratamientos contra el virus, en el marco de una acción global coordinada por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
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Las obras, que estarán concluidas en unos dos meses, están en la etapa inicial con el descapote de terreno, demarcación y montaje de bases con cemento.
La unidad hospitalaria de la Fiocruz tendrá 200 camas exclusivas para el tratamiento intensivo y semiintensivo de pacientes críticos infectados con el nuevo coronavirus.
La Fiocruz, vinculada al Ministerio de Saludl, es responsable por el desarrollo y la producción de la mayoría de las vacunas que Brasil usa en sus campañas de inmunización, así como por numerosas investigaciones en salud, principalmente para el desarrollo de nuevas medicinas.
Su hospital de campaña reforzará la labor de otras diez unidades que ya están siendo montadas en diferentes puntos de Río de Janeiro y que juntas suman 2.400 camas para atender pacientes infectados con la COVID-19.
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Una de estos centros hospitalarios se está levantando en el complejo deportivo que circunda el icónico estadio Maracaná, uno de los mayores templos futbolísticos del mundo y en el que se disputaron las finales de dos mundiales y de unos Juegos Olímpicos.
El espacio, que dispondrá de 400 camas, estará ubicado en el estadio de atletismo Celio Barros, localizado dentro del complejo, y de acuerdo con las autoridades, estará listo en 15 días.
Según el último reporte del Ministerio de Salud, al menos 159 personas han muerto por la pandemia del coronavirus en Brasil, donde ya hay más 4.500 infectados.
El estado de Sao Paulo, el más rico y populoso del país, con unos 46 millones de personas, es la región más afectada por la pandemia al contabilizar 113 fallecidos y 1.517 infectados con COVID-19.
Por detrás se sitúa el estado de Río de Janeiro con 18 decesos y 657 casos confirmados.