Kevin K. Sullivan, embajador de los Estados Unidos en Nicaragua, felicitó este lunes al diario Confidencial “por sus 25 años defendiendo los valores democráticos de la libertad de prensa y del periodismo independiente”.
Horas más tarde, la Cancillería de Nicaragua atacó con virulencia al embajador por la que juzgó como “detestable injerencia invasora” y acusándolo de “intromisión en los asuntos de nuestro país”.
“El señor Sullivan se expresa continuamente, de manera directa e indirecta, en detrimento de nuestras decisiones institucionales y nuestras políticas nacionales independientes, de país independiente, que no es colonia de nadie”, subrayó la nota de la diplomacia nicaragüense.
Según el régimen Ortega, el representante de los Estados Unidos “pretende desconocer” la legitimidad del Estado de Nicaragua y, por ello, le exigió que “cese sus ataques encubiertos, sus hipócritas salutaciones, disfrazados de una cortesía diplomática”.
“Renuncie de querer imponer su vulgar, rastrera, aberrante, insolente, innoble, abominable y decadente política yanqui, que declaramos, una vez más, nada grata para los nicaragüenses", expresó la Cancillería en su comunicado.
Adicionalmente, el régimen aseguró que en Nicaragua se vive en “libertad, paz y democracia, gracias a la valentía de nuestro pueblo, y de acuerdo a los principios y normas de nuestra Constitución”.
Actualmente, hay más de 150 presos políticos en las cárceles de Nicaragua, entre ellos siete aspirantes presidenciales, a menos de un mes de la convocatoria a una elección presidencial viciada, sin garantías e ilegítima.
Previamente, el régimen Ortega había rechazado las posiciones de algunos socios ideológicos, como hizo constar por la presunta “posición injerencista y entrometida” de México que “cumpliéndoles sumisa y fielmente a los yanquis”, le sirve a los Estados Unidos como “interventores permanentes en nuestros asuntos propios, por encargo del imperio”.
En el caso de Argentina rechazó su “indeseable intromisión, injerencia y acosos sostenidos” en los asuntos internos de Nicaragua.
En declaraciones a este medio, Marcelo Valle Fonrouge se sumó al embajador Sullivan en la felicitación a Confidencial y a su director Carlos Chamorro por los 25 años de inclaudicable labor periodística sin censura y dijo que “para el gobierno Ortega lo externo, los que no concilian con los deseos, intereses o dogmas del gobierno Ortega, son injerencistas”.
Valle Fonrouge, quien fuera embajador de la Argentina en Nicaragua durante seis años, añadió sobre la nota de la diplomacia de Ortega dirigida a Sullivan: “si salen sus adjetivos se quedan sin nota”.
Todo ello ocurre cuando el rechazo a Ortega va en aumento, además del incremento de la represión, la mala gestión de la crisis sanitaria ha hecho mella en su popularidad. Hoy siete de cada diez nicaragüenses reprueban la actuación del mandatario sandinista, según la firma costarricense Cid Gallup.