Facebook determinó suspender durante dos años las cuentas del expresidente Donald Trump, quien fue silenciado en la plataforma “tras alentar el asalto al Capitolio” de Estados Unidos, el 6 de enero. La medida será reevaluada el 7 de enero de 2023.
“Dada la gravedad de las circunstancias que llevaron a la suspensión del señor Trump, creemos que sus acciones constituyeron una severa violación de nuestras reglas, lo que amerita la mayor penalidad posible”, escribió este viernes Nick Clegg, vicepresidente de asuntos globales de la empresa y quien fue viceprimer ministro británico en el Gobierno de David Cameron.
Facebook advirtió además que no ha descartado más sanciones “si Trump comete nuevas violaciones en el futuro”. El reiterado incumplimiento de las políticas de la plataforma podría provocar la “suspensión definitiva de sus páginas y cuentas”.
“Cuando finalmente se levante la suspensión, habrá un conjunto estricto de sanciones en rápida escalada que se activarán si Trump comete más violaciones en el futuro, hasta e incluyendo la eliminación permanente de sus páginas y cuentas”, advirtió la compañía.
“Sabemos que la decisión de este día será criticada por muchas personas, sean simpatizantes del expresidente o no, pero es nuestro trabajo tomar una decisión proporcionada, justa y transparente de acuerdo a la instrucción que nos dio el consejo de supervisión”, añadió Clegg, un político liberal-demócrata, admitiendo que la medida suscitará controversias.
El conglomerado estadounidense de redes sociales también resaltó que, esta “sanción de dos años por violaciones graves”, se consideró a partir de “la necesidad de que sea lo suficientemente larga para permitir un período de tiempo seguro después de los actos de incitación, lo suficientemente importante como para disuadir al Señor Trump y a otros de cometer tales actos”.
El pasado 5 de mayo, los expertos contratados por la empresa de Mark Zuckerberg, para integrar un consejo de supervisión independiente, recomendó a Facebook decidir el futuro de Trump en la plataforma e indicar públicamente las sanciones establecidas por la plataforma por infringir los reglamentos.
“Estamos agradecidos de que la Junta de Supervisión haya reconocido que nuestra decisión original de suspender la cuenta de Trump, fue correcta y necesaria, en las circunstancias excepcionales en ese momento. Pero aceptamos absolutamente que no contamos con protocolos de aplicación adecuados para responder a eventos tan inusuales. Ahora que los tenemos, esperamos que solo sean aplicables en las circunstancias más raras”, precisó Facebook.
En tanto, Donald Trump, ha calificado el castigo como un “insulto” a sus 74.2 millones de votantes: “No deberían permitirles [a Facebook] salirse con la suya con la censura... ¡Nuestro país no pude permitirse más este abuso!”. “La próxima vez que esté en la Casa Blanca no habrá más cenas a petición de Mark Zuckerberg y su esposa. ¡Serán estrictamente negocios!”, advirtió en otro mensaje enviado por correo electrónico, según publicó El País.
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Al igual que Twitter, Facebook suspendió a Trump, tras los sucesos en el Congreso de Estados Unidos, que provocaron la muerte de cinco personas. La plataforma denunció que dos publicaciones del entonces presidente, “violaron las normas sobre el discurso de odio”.
La compañía consideró también que “la presencia del político en su comunidad era un riesgo pues podía incitar nuevamente a la violencia”.
Facebook anunció además que nuevas medidas acaban “con la excepcionalidad con la que gozaban los políticos”. Desde 2016, la empresa ponderaba el discurso y las expresiones políticas consideradas relevantes y noticiosas, lo que favorecía que no pasaran filtros de moderación, “un beneficio que el algoritmo no deja al alcance de la mayoría de usuarios”.
En un largo documento que recoge los procedimientos actualizados por Facebook este viernes, se indica que esta generalidad concluirá. La compañía evaluará caso por caso, teniendo en cuenta aspectos relacionados con: “la severidad de la falta y el historial del personaje en la red, la influencia del político sobre personas que acudan a la violencia para resolver conflictos y la posibilidad de daños físicos”.
Las figuras públicas que sean sancionadas no podrán durante un mes publicar. Los casos más graves tendrán penas de dos años y en los casos más extremos se eliminarán las cuentas.
La tecnológica refirió que entre los nuevos procedimientos también se tendrá una mayor transparencia en la comunicación sobre los “castigos” que se impongan, una decisión que anteriormente no era de dominio público.
