Bebé de 11 días murió en Hospital Nacional: "Esos asesinos ginecólogos me la acabaron"
La niña nació el 28 de octubre con traumatismo perinatal y una parálisis braquial en el brazo derecho como consecuencia de la violencia obstétrica
Actualizado: Thu, 11/17/2022 - 09:44
La madre cubana Roxana Periú Ramírez denunció que su bebé de 11 días falleció el pasado 8 de noviembre en el Hospital Nacional "Dr. Enrique Cabrera", de La Habana, luego de un parto infernal y violencia obstétrica.
Periú Ramírez contó a ADN Cuba que ingresó al centro médico en la madrugada del 27 de octubre con dolores de parto, aunque sin contracciones aún. A las 10 p.m. de ese día los sanitarios le realizan un ultrasonido y le comunican que la niña pesaba 4200 gramos y medía más de 50 centímetros, por lo que posiblemente le realizarían una cesárea.
En la madrugada del 28 de octubre la joven comienza con contracciones seguidas y sangrado.
"Estuve sangrando más de lo normal, tenía muchos dolores, no podía estar sentada, estaba incómoda, y el sangrado no paraba. La sangre me chorreaba por las piernas. Sobre las 7 a.m. la doctora Claudia me rompe la fuente y estaba en 7 de dilatación, pero dice que hasta que no llegara a 10 no podía parir. Los dolores aumentaron, el sangrado fue aún peor, pero no, allí me tenían tirada en un asiento, no me querían reconocer más hasta la 1 p.m", añadió.
A las 11 p.m. de ese día 28 llegó el equipo de médicos y uno de ellos, el doctor Pablo, decide que no esperarían y que ella debía comenzar las labores de parto inmediatamente.
Fue entonces que comenzó el infierno para Roxana: "Yo pujaba lo más que podía, me decían aguántate las piernas y échalas para atrás y así lo hacía, pero aun así la doctora Misuqui decía que no podía salir (...) Vienen dos enfermeros y se me suben en la barriga para hacer fuerza para que saliera la niña; me cortaron cantidad, me desgarraron el cuello del útero, y por otro lado la doctora Misuqui seguía diciendo que no podía (...) Hasta que lograron sacarla".
La niña nació el 28 de octubre con traumatismo perinatal y una parálisis braquial en el brazo derecho, como consecuencia de la violencia obstétrica. Inmediatamente fue trasladada para la Sala de Neonatología y solo la abuela pudo verla, por poco tiempo y gracias a que insistió.
"Allí estuvo 11 días en terapia desde el primer momento. Todos los días me decían un diagnóstico diferente de la niña, primero parálisis braquial, luego una bacteria en el estómago y le tenían suspendida la vía oral. Hizo una acidosis metabólica, la entubaron, trastorno en los electrolitos, dificultad respiratoria, la trasfundieron dos veces, un hematoma en la suprarrenal derecha y el hígado inflamado", explicó la madre cubana.
Según la explicación de los neonatólogos, la bebé hizo un paro y falleció el 8 de noviembre.
Por su parte, Medicina legal dictó que fue muerte por enfermedad.
"Mi pregunta es ¿cuál enfermedad? Si mi hija estaba bien, todos los ultrasonidos perfectos; yo jamás dejé de ir a una consulta. Simplemente que esos asesinos ginecólogos me la acabaron por dentro y todo por no hacerme cesárea porque supuestamente no habían recursos para hacerme cesárea", denunció Periú Ramírez.
La madre pide que se haga justicia para que nadie más tenga que pasar por una situación tan dolorosa.
"Solo pido justicia, ya nada me la va a devolver pero que el mundo entero lo sepa y se haga justicia", concluyó.
Este es el segundo caso de muerte de un bebé en el Hospital Nacional que reporta ADN Cuba esta semana.
Un bebé recién nacido falleció el pasado 31 de octubre en ese hospital por supuesta muerte súbita a solo dos días de su nacimiento, pero su familia cree que se debió a negligencia médica.