Guía para sexting seguro

Hoy te compartimos recomendaciones de seguridad digital para antes, durante y después de sextear y más abajo herramientas recomendadas
 

Reproduce este artículo

Enviar y recibir nudes puede ser una forma muy divertida de explorar y disfrutar tu cuerpo y sexualidad. El sexting, como todo, tiene sus potenciales riesgos y vulneraciones. La vida es un riesgo, amigxs. Por esto te invitamos a incluir cuidados digitales para que tu experiencia sea excitante, creativa, divertida y segura.

Hoy te compartimos recomendaciones de seguridad digital para antes, durante y después de sextear y más abajo herramientas recomendadas.

¿En qué herramientas te puedes apoyar?

Para anonimizar:
ObscuraCam es una app que permite difuminar tu rostro o rasgos que te identifiquen y desees ocultar. Lo ideal es tomar la foto desde la app, para que no inserte los metadatos, que son información que contienen tus archivos; los más comunes son: datos de geolocalización, fecha y hora de tus fotos, número de tu teléfono e información sobre el dispositivo que estás usando.

Para enviar mensajes y fotos:
La app de mensajería Telegram tiene la opción de crear un chat secreto con cifrado de punta a punta, destrucción de mensajes, inhabilitar capturas de pantalla y bloqueo de reenvíos.
Signal también tiene cifrado de punta a punta y funciones útiles como: desaparición de mensajes y el bloqueo de captura de pantalla (lo activas desde configuración > privacidad > bloqueo de pantalla)

Para borrar archivos:
CCleaner funciona para computadoras y la app de Google Files detecta carpetas de thumbnails (o vistas previas) que se almacenaron en tu celular.

Para video-llamadas:
La herramienta Jitsi te permite realizar videollamadas con cifrado de punta a punta, es de libre acceso, no tienes que instalar nada, tampoco hacer login y poner una contraseña a tu sala.

La práctica del 'sexting' ha aumentando en los últimos años, sobre todo entre los menores de 18 años, según un reciente metanálisis publicado en la revista JAMA Pediatrics. En este se reconoció que una parte considerable de la juventud practicaba 'sexting' enviando material sexual -1 de cada 7 (14,8%)- y recibiéndolo -1 de cada 4 (27,4%)-.

Aunque no sea una práctica de exclusividad juvenil, la infancia y la adolescencia, son los grupos más vulnerables. Otorgando especial atención a los preadolescentes de 10 a 12 años.

¿Qué es el sexting?

Su nombre es un acrónimo de 'sex' o sexo y 'texting' o escribir mensajes. Consiste en enviar mensajes, fotos o vídeos de contenido erótico y sexual personal a través del móvil mediante aplicaciones de mensajería instantánea o redes sociales, correos electrónicos u otro tipo de herramienta de comunicación.

Habitualmente se suele realizar de manera íntima, entre dos personas, aunque pueda llegar a manos de muchos otros usuarios si no se respeta esa intimidad. Lo que por desgracia es bastante habitual. De ahí su mala fama, a pesar de ser una de las prácticas más comunes en la actualidad para 'subir grados' tras conocer a alguien en una app de contactos, por ejemplo, o bien para 'calentarse' en pareja y mantener relaciones sexuales cuando la distancia lo impide o, simplemente, por placer o para escapar de la rutina.

Puede ser, por tanto, una práctica sexual en sí misma, sin necesidad de verse en persona después, o servir como calentamiento previo a una 'quedada'.

Pero lo que tendría que ser un juego erótico y algo placentero, podría convertirse en un verdadero drama si no consideramos los riesgos a los que nos exponemos. El comando británico de explotación infantil y protección en línea CEOP, afirma que "existen miles horas de grabación de webcams de chicas británicas publicadas en webs de pornografía infantil", un mensaje alarmante pero realista que nos ayuda a ser conscientes del uso fraudulento del 'sexting' y las tecnologías.

Conocer estos riesgos nos ayuda si queremos realizar esta práctica, y de ser así, con quién, cómo y cuando hacerlo. Al igual que a tomar medidas, sobre todo, en relación a los más pequeños.