Nelva Ortega, la esposa del coordinador general de Unpacu, José Daniel Ferrer, denunció que la entrega de la sentencia contra el opositor se encuentra atrasada por el régimen cubano.
Durante el juicio, que ocurrió a finales de febrero, se había anunciado que darían la sentencia el 12 de marzo.
En declaraciones a ADN Cuba, Ortega dijo que durante la visita reglamentaria del jueves anterior, constató que Ferrer sigue bajando de peso y se encuentra sin atención médica.
"Fue víctima de violencia el 29 de febrero, donde fue sacado a la fuerza esposado de forma bastante fuerte. Nos enseñó las marcas que todavía tiene. Lo llevaron corriendo a empujones a una oficina donde el jefe de la prisión, el mayor Osmany, le dijo todo tipo de obscenidades y que no iba a salir nunca de la prisión y que le iba a prohibir el único beneficio que tenía, que son las visitas familiares", denunció la mujer.
De acuerdo con el relato de Nelva, el activista "mantuvo sus principios sin claudicar y dándole las respuestas que merece. Le llevaron de la misma manera de rgreso a la celda, el mayor Montoya y un funcionario que se hace llamar Ariel".
También Ferrer agradeció a las personas que lo están apoyando en su lucha y pidió a todas las organizaciones que están difundiendo su causa que lo hicieran miembro.
El líder de la Unión Patriótica de Cuba fue detenido el pasado primero de octubre, tras un allanamiento ejecutado por fuerzas combinadas del Ministerio del Interior, donde no presentaron orden de detención, ni de registro, ni acta de objetos confiscados.
A finales de noviembre, Amnistía Internacional envió una carta al gobernante Miguel Díaz-Canel, solicitando que le permitieran entrar a Cuba para observar el proceso judicial al que fue sometido el líder opositor.
La organización señaló que el Comité contra la Desaparición Forzada de Naciones Unidas expresó preocupaciones sobre el caso de Ferrer y solicitó al Estado cubano información sobre su paradero, estado de salud y motivos del arresto. Tras la implicación de la ONU el régimen de La Habana permitió a la esposa de Ferrer visitarlo.
José Daniel Ferrer, de 49 años, que pasó casi ocho en prisión como parte de los 75 disidentes encarcelados en la “Primavera Negra” de 2003 fue encarcelado por el régimen cubano el pasado mes de octubre de 2019 y su familia casi no ha podido verlo.
