La ciudadana cubana identificada en Facebook como Bárbara Tenreyro mostró en una directa el estado actual de su vivienda debido a la fuerte explosión en el hotel Saratoga hace cuatro meses.
Habitaciones llenas de escombros y el hurto de sus pertenencias es lo que encuentran los inquilinos del inmueble: "Toda la pudrición, después de cuatro meses la misma m*****a sigue. Rompieron la puerta y se lo llevaron todo", se escucha decir a Tenreyro en su directa.
El pasado 6 de septiembre, la usuaria compartió una publicación de su autoría del mes de agosto, y comentaba que, tras cuatro meses del fatídico suceso, "los vecinos de Prado 609 seguimos como el primer día sin una respuesta a que será nuestro futuro".
En el post anterior, Tenreyro señalaba que los inquilinos presentaban "una situación en la que ningún ser humano quisiera estar: fuera de nuestro hogar y de todo lo que construimos con esfuerzo propio como resultado de muchos años de trabajo". Relataba que con el accidente se perdieron los recuerdos, la estabilidad emocional y a seres queridos debido a "causas ajenas a nosotros, provocado por la explosión del Hotel Saratoga".
"Es cierto que de inmediato nos atendieron brindándonos donde vivir, aunque nunca como nuestros hogares, pero pasado el tiempo ya se alargan las soluciones. Esperando un dictamen de la ENIA, no recibimos la respuesta que necesitamos para saber qué va a pasar con nuestro edificio" denunció.
Tenreyro también relata que los vecinos quisieron "sacar muchas más cosas que quedaron y no lo permitieron porque era peligroso por posible derrumbe, pero al visitarlo hace unos días nos encontramos que han sustraído desde fregaderos, losas de pared, hasta efectos electrodomésticos, etc".
No se sabe quienes fueron las personas que sustrajeron los bienes, y "nadie dice de quien es la responsabilidad, habiendo prometido que cuidarían del lugar".
Tras la visita al inmueble los propietarios se percataron que "no se ha hecho nada allí, los escombros siguen en los pasillos e incluso comida putrefacta desde el día de la explosión".
En mayo del presente año, gran parte del hotel Saratoga colapsó tras un estallido atribuido oficialmente a una fuga de gas. La catástrofe afectó también a edificios cercanos al inmueble turístico, propiedad del conglomerado militar Gaesa, entre los cuales se destacan un templo bautista, un edificio multifamiliar y una escuela.
