"Miren, esto es una vista de mi Habana, de mi Habana Vieja. Vean. Así vivimos nosotros, los cubanos: en un peligro constante para nuestras vidas. ¿A quién le importa? A nadie. La realidad cubana es esta. Vergüenza tenemos que sentir de seguir apoyando. Esta es la realidad del cubano de a pie, del cubano que tiene que pensar qué voy a comer hoy. No es la realidad de esos hoteles lindos que existen en Varadero, en los cayos. Este es nuestro cayo. Cayo que nos va a sepultar a todos". Así de contundente se muestra Ariadna Mena, una cubana que subió hace unos días un video casero del desastroso paisaje que ve desde su balcón habanero: Una ciudad en ruinas. "Esta es la Cuba real", insiste.
Como ella, cada vez más cubanos están usando las redes sociales para denunciar las contradicciones entre el discurso oficial de la propaganda cubana y la realidad que viven en la isla.
Un reciente derrumbe en la Habana Vieja catalizó el malestar de muchos cubanos que ver la ciudad cayéndose a pedazos mientras el gobierno no hace nada o regala sólo promesas. En medio de su dolor, los familiares de las tres menores fallecidas en el derrumbe culparon al gobierno y señalaron la desigualdad en la que viven: en los barrios donde habitan los dirigentes no se caen los balcones, y sus hijas no corren el peligro de las víctimas de Jesús María.
La desigualdad social como un factor cada vez más presente en la vida cubana es tema de numerosos testimonios y un tema habitual de la prensa independiente cubana. Pero ahora hay muchos jóvenes cubanos que han llevado su inconformidad a las redes sociales, donde estos videos de la miseria cubana suelen volverse virales y suscitar gran cantidad de comentarios críticos.
El youtuber cubano, Frank Camallerys, es uno de ellos. Uno de sus más recientes video, que acumula ya más de 55 mil visualizaciones, se centra en la desigualdad social en Cuba a partir de la realidad de la vivienda. "Así vive la la clase alta y la clase baja en Cuba", se titula el testimonio del influencer, que compara el barrio del Vedado y barrios marginales.
"Debo explicar que en Cuba el nivel social no va ligado al nivel intelectual. En la clase baja puedes encontrar médicos y abogados", explicó Camallerys mientras mostraba apartamentos modernos y varias mansiones coloniales del Vedado que están perfectamente restauradas y otras que casi se vienen abajo por la falta de dinero para repararlas o se han vuelto cuarterías.
En un paseo comparativo entre el barrio de Miramar, donde suele seguir viviendo la clase alta habanera, y Marianao o La Lisa, el youtuber muestra las evidentes diferencias en la limpieza y cuidado de las calles, la distribución urbana, el comportamiento social, cosa que repercute en los precios de venta del mercado inmobiliario habanero.
Camallerys muestra también imágenes del barrio marginal Los Pocitos, en una situación de total abandono.