El nuevo comandante de las Fuerzas Armadas de Ecuador, Luis Lara, dijo este martes que no permitirá que se repitan “asonadas” que afecten la paz y la seguridad, un mes después de unas violentas protestas que sacudieron al país andino en rechazo a medidas de austeridad del Gobierno.
El presidente Lenín Moreno desistió a mediados de octubre de eliminar un subsidio a los combustibles con el propósito de poner fin a una de las peores protestas en la última década en la nación, en medio de saqueos, ataques a bienes públicos y privados y la retención de uniformados por parte de los manifestantes.
El Gobierno ha dicho que detrás de los disturbios, que estallaron a inicios de octubre por casi dos semanas, estuvieron involucrados grupos violentos, sin dar mayores detalles.
“Qué no se equivoquen los violentos, que no confundan los grupos criminales (...), que no olviden los corruptos. Nuestras Fuerzas Armadas (...) no van a permitir que se repitan asonadas que atenten contra la paz del Ecuador y la seguridad de sus ciudadanos”, dijo Lara tras asumir como comandante de las Fuerzas Armadas del país.
“No podemos pasar por alto esta demostración de fuerza de grupos internos y transnacionales que quieren imponer un modelo que atenta contra los principios democráticos básicos, vulneran la Constitución y pone en alto riesgo la convivencia social”, agregó durante una ceremonia militar a la que asistió Moreno.
Moreno y el movimiento indígena acordaron a mediados de octubre iniciar un diálogo para definir mecanismos para focalizar los subsidios a la gasolina extra y el diésel.
Pero los indígenas y otros sectores sociales han cuestionado las propuestas económicas del Gobierno y han planteado medidas alternativas.
El mandatario ha dicho que espera concluir la ronda de diálogos para anunciar un mecanismo para racionalizar los subsidios, luego de dar a conocer medidas para apoyar el desarrollo del sector rural.
(Con información de Reuters)