Quito, 10 oct (ADN CUBA).- Los familiares de Óscar Pérez, el expolicía venezolano asesinado en enero del 2018 por las fuerzas del régimen de Nicolás Maduro, fueron finalmente asilados en EE. UU. por un juez de inmigración en California, informó este jueves el portal de noticias Infobae.
Los beneficiados con el asilo son la madre, la esposa y los dos hijos del expolicía. El proceso se extendió por dos años y establece un precedente importante en materia de inmigración, dijo el portal.
“Ya que llegaron a Estados Unidos por la frontera con México, en lugar de entrar con una visa, estuvieron en proceso de deportación desde el principio, incluyendo un tiempo en detención. Por eso el caso fue atendido por un juez en lugar de un agente de asilo,” explicó el abogado Julio Henríquez, quien es el coordinador legal internacional de Foro Penal y el representante en el juicio de la familia Pérez.
Henríquez indicó además que el reconocimiento por un juez de inmigración como un grupo social en particular es un precedente positivo.
“El caso encaja en los precedentes de asilo recientes, que son más estrictos, y la abogada del gobierno decidió renunciar al derecho de apelar, por lo que la sentencia quedó firme,” añadió el abogado.
Pérez fue abatido el 15 de enero de 2018 luego de varios meses de clandestinidad tras rebelarse contra la dictadura chavista. Ese día, la Policía Nacional lo rodeó y después de un enfrentamiento armado lo terminó abatiendo.
Lea también
Danahís Vivas, madre de Óscar Pérez, habló sobre el proceso y todo lo que vivió luego del asesinato de su hijo.
“Poca gente sabe que estuvimos detenidos en la frontera, que pasamos un tiempo en centros de detención de inmigración desde septiembre de 2017, cuando Óscar estaba en la clandestinidad”, dijo la madre, según Infobae.
Y añadió: “La muerte de Óscar no la hemos superado, lo que vivimos el 15 de enero de 2018 es una cicatriz abierta. Pero es nuestro deber luchar para que el sacrificio de Óscar no sea en vano. Por eso, seguiremos denunciando al régimen de Maduro en todas las instancias.”
Pérez saltó a la fama en julio de 2017 cuando, en medio de las protestas antigubernamentales que dejaron más de 100 muertos en Venezuela, lanzó, según el Gobierno, varias granadas desde un helicóptero de la Policía científica contra dos edificios gubernamentales en Caracas.
Desde entonces se encontraba huyendo de las autoridades y el Gobierno venezolano tenía emitida un alerta nacional e internacional para su captura, detalló Infobae.
El día de su asesinato, el policía publicó una serie de vídeos en Instagram en los que señalaba que las autoridades lo tenían cercado a él y al grupo que lo acompañaba.
Y aunque gritaba que se quería entregar, los policías chavistas no dejaban de dispararle pese a su disposición.
En su último vídeo, se observa al policía con manchas en la cara, que parecen sangre, y gritando: "Nos vamos a entregar, no sigan disparando". Pérez aseguró en ese último audiovisual que tenían heridos.
