Reinaldo García Zapata, Gobernador de La Habana, informó en la Mesa Redonda que a raíz de la explosión que ocurrió en el Hotel Saratoga se registraron afectaciones en 23 inmuebles cercanos, entre los cuales hay 17 edificios de viviendas.
Los reportes indican que hubo dos edificaciones "muy afectadas", pues en el edificio Prado 609, 15 departamentos colapsaron totalmente; y en el edificio Zulueta 512 se identificaron daños estructurales en 10 departamentos. Al respecto, el gobernador de la capital señaló que se brinda asistencia a las familias damnificadas y se está coordinando su reubicación.
No obstante, indicó que, según datos preliminares, en el Hotel Saratoga no hay "daños estructurales considerables" por lo cual "es posible su recuperación".
A causa de la explosión se reportaron daños, además, en el histórico Teatro Martí, la sede de la Asociación Yoruba, el Capitolio y un templo Bautista.
Esteban Jerez, director de la institución cultural yoruba, declaró que "la instalación sufrió daños fundamentalmente en la carpintería de la fachada en puertas, falso techo, entre otras" según informó la periodista Susana Antón en su perfil de Twitter.
Según declaraciones del gobernador de la capital, las líneas de trabajo prioritarias son atender a las familias afectadas, la recuperación del hotel y de las viviendas dañadas, reubicación de los niños de la escuela ubicada al costado del hotel y recuperación de ese centro docente, rescate de todas las instalaciones afectadas y mantener una información oportuna a la población.
Sin embargo, es preciso recordar que las políticas de construcción y reparación de viviendas en Cuba han sido ineficientes. Según estadísticas oficiales, el 39% de las edificaciones de la Isla están clasificadas en estado constructivo malo o regular, y existe un déficit de casi un millón de inmuebles.
A ello se suma que el régimen ha admitido que la vivienda es un problema no resuelto por la llamada "revolución". Un reportaje publicado en 2019 en el portal oficialista Cubadebate reconoció que en el país existe un déficit habitacional ascendente a más de 1,3 millones de hogares.
Este es el segundo año de ejecución de la Política de la Vivienda, establecida por Miguel Díaz-Canel para completar en un periodo de 10 años, tras el cual declaró que se resolvería el problema del fondo habitacional de Cuba.
Las viviendas terminadas en 2021 representan un 58% de cumplimiento del plan previsto, y un 39% de las terminadas en 2020, cuando se otorgaron cerca de 48 000 viviendas, según cifras oficiales.