Una investigación del Departamento de Justicia sobre las operaciones de Major League Baseball en América Latina y el tráfico de jugadores cubanos se ha expandido en los últimos meses, y el caso del pelotero santiaguero Héctor Olivera es uno de los principales focos de la pesquisa según Washington Post.
La nueva historia, publicada esta semana en el influyente diario de la capital estadounidense, afirma que las circunstancias que rodearon la salida de Olivera de Cuba y la eventual firma con los Dodgers de Los Angeles son el centro de “una amplia investigación “ , según tres personas con conocimiento de la pesquisa que hablaron en condición. de anonimato.
El Departamento de Justicia declinó hacer comentarios, dijo el periódico. Olivera fue contratado por la organización de los Dodgers hace cuatro años por la cifra de 62,5 millones de dólares, con un bono de 20 millones por seis temporadas y después cambiado a los Bravos de Atlanta
En abril de 2016, fue arrestado en Washington DC acusado de violencia doméstica y recibió una suspensión de más de 80 partidos y la condena de por vida de las Grandes Ligas.
En mayo de 2019 volvió a Santiago de Cuba de visita por primera vez tras su deserción hacia las Grandes Ligas en septiembre de 2014. Un año antes de su fuga había re-aparecido en las Series Nacionales tras un largo tratamiento médico por una trombosis en el brazo izquierdo.
Según el Post Olivera ha testificado ante un gran jurado federal en Washington, de acuerdo a personas con conocimiento de la investigación. Dijo el diario que Olivera declinó hacer comentarios para este articulo a través de su abogado, de Miami Frank Quintero Jr.
La reseña periodística con el título “Mientras los federales investigan las operaciones latinoamericanas de MLB, un llamativo scout y un acuerdo en disputa generan interés” entra en varios detalles de la actual batalla legal entre Olivera y el cazatalento de origen cubano establecido en República Dominicana, Rudy Santín.
Santín fue un “buscón” de las Grandes Ligas por más de 30 años, de los Yankees de Nueva York, los Rays de Tampa Bay y los Gigantes de San Francisco. De acuerdo a la publicación, se reflejan afirmaciones de que Olivera fue obligado a firmar un contrato , a punta de armas, con un monto desmedido a favor de Santín y sus asociados que lo ayudaron a salir de Cuba.
El scout implicado niega la acusación y a su vez acusa al pelotero cubano de estafa al alegar que Olivera se burló a último minuto del acuerdo con ellos para firmar con el agente Greg Genske, para los Dodgers. Lo cierto es que el litigio ha llamado poderosamente la atención de los agentes federales.
Actualmente, hay una investigación federal “inquietantemente silenciosa “sobre las prácticas de firmas internacionales de Major League Baseball, escribió un analista en el sitio digital de NBC Sports.
“En el crepúsculo ético que es la búsqueda internacional en el béisbol, los clubes, la liga y los agentes y otros representantes de jugadores se han ensuciado las manos a lo largo de los años.” afirma el blog
Si bien los funcionarios de MLB han culpado de la difícil situación de los jugadores cubanos al embargo de Estados Unidos a la nación isleña, algunos “ exploradores”, agentes y ex fiscales federales argumentan que las reglas de las Grandes Ligas, potencian el “mercado negro” en América Latina ya que hace que los jugadores cubanos que desertan se dirijan primero a otros países en lugar de venir directamente a los Estados Unidos.
Señales de presuntos fraudes en los documentos de residencia que jugadores cubanos han obtenido rápidamente en México, República Dominicana y Haití, y en otros lugares de Centroamérica, están siendo analizadas en la actual investigación, según diversas publicaciones.
