Más de 600 cubanos, en su mayoría profesionales, realizan un viaje épico entre varias naciones de Europa oriental para llegar a Italia y España, reveló este 30 de noviembre la cadena árabe Al Jazeera.
Los cubanos viajan sin contrabandistas o coyotes e intentan llegar a la Unión Europea con un vuelo inicial La Habana-Moscú, luego a Belgrado, la capital Serbia y de allí atraviesan Macedonia del Norte hasta la frontera griega. Otra vía es La Habana-Moscú, luego a Minsk, la capital de Bielorrusia, y de allí a Belgrado vía Estambul.
El tema salió a la luz el 28 de octubre cuando unos 130 cubanos intentaron volar desde la isla de Zakynthos (Grecia), en el mar Jónico, a Milán, en el norte de Italia.
De pronto, medios locales y las autoridades comprendieron que muchos isleños utilizaban las facilidades legales de Grecia, convertido desde 2015 en la gran puerta de los migrantes que buscan asentarse en los países del Espacio Schengen que comparten 26 naciones europeas.
Al Jazeera entrevistó a más de uno. Pedro y su novia, Laura, volaron de La Habana a Moscú, donde los cubanos no tienen visa para viajar. Desde allí volaron a Belgrado, también sin visado, y tomaron autobuses y taxis a través de Serbia y Macedonia del Norte hasta la frontera griega.
“No teníamos un plan”, dijo Laura, de 27 años, copropietaria de un restaurante con Pedro en La Habana. "Vendimos todo, compramos boletos y nos fuimos a Rusia".
Carlos, de 23 años, otro solicitante de asilo cubano con el que habló la cadena árabe, tomó una ruta ligeramente diferente. Voló de Moscú a Minsk, Bielorrusia, y de allí a Belgrado vía Estambul.
“Hay abogados, médicos, ingenieros civiles, no somos bandidos”, dijo Juan. “Queremos que el país que nos acogerá vea que podemos ofrecer algo a la sociedad, no estamos aquí para extraer riqueza y volver a casa, sino para ser parte de la sociedad y contribuir a ella".
Todos los entrevistados por Al Jazeera citaron una economía en ruinas y la represión como razones para salir de Cuba, especialmente la ola de arrestos y condenas contra los manifestantes que participaron en las protestas antigubernamentales del 11de julio.
“Las necesidades básicas no están cubiertas”, dijo Pedro. "Medicamentos, jabón, papel higiénico, comida, todo escasea y, cuando aparecen, son muy caras".
Las autoridades cubanas instituyeron recientemente una tarjeta de efectivo con la que se pueden comprar esos productos en tiendas bien abastecidas, pero las tarjetas se emiten solo para personas con acceso a divisas.
“Si tienes esta tarjeta, los familiares te pueden enviar dólares desde el exterior y puedes vivir”, dijo Laura. "Si no tienes a nadie que te envíe dólares, pasas hambre".
Una vez en Grecia, enfrentan difíciles condiciones, indica el reportaje. Carlos asegura haber gastado 2000 dólares en nueve intentos fallidos para intentar llegar a Alemania o España y ahora ha quedado sin dinero.
Sin embargo, dice que lo tendrían que amarrar para llevarlo de regreso a Cuba. “Grecia como democracia respeta los derechos humanos. Cuba no tiene democracia ni derechos humanos", concluyó.
