Al menos 23 personas murieron y decenas resultaron heridas después de que un paso elevado del metro se derrumbó en la Ciudad de México mientras cruzaba un tren, informaron medios de prensa.
Se cuenta que varios vagones de tren se precipitaron al suelo, aplastando al menos otro vagón, que estaba en una carretera muy transitada, debajo del puente que colapsó. Informan que hay varios niños entre los fallecidos. Los equipos de rescate y los bomberos todavía están buscando sobrevivientes.
La alcaldesa de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, dijo que aún se estaba investigando la causa del accidente, pero parecía que una viga había cedido en el paso elevado.
Una persona atrapada en un automóvil debajo de la estructura derrumbada fue sacada viva y llevada al hospital, también informó la funcionaria. Al menos 65 personas resultaron heridas y siete se encontraban en estado grave.
Los residentes ya habían informado grietas en la estructura después de un terremoto mortal en 2017, según los medios locales. El periódico El Universal de México dice que las autoridades de transporte hicieron reparaciones luego de los informes, pero al parecer no estuvieron bien aseguradas.
El accidente ocurrió alrededor de las 22:00 hora local del lunes. De inmediato se envió una grúa al lugar para estabilizar los vagones en medio de preocupaciones de que pudieran caer todos a la carretera.
"Solo escuchamos un fuerte trueno y todo se vino abajo", dijo a El Universal Mariana, de 26 años, quien sobrevivió al accidente.
"Había mucha gente parada y sentada en el carruaje, y cuando el carruaje se cayó, salimos volando y nos golpeamos la cabeza con el techo", describió al momento del accidente.
También dijo que ella y otros pasajeros quedaron atrapados entre el metal retorcido del carruaje antes de que lograran escapar por una ventana.
El sistema de metro de la Ciudad de México es uno de los más utilizados del mundo y transporta a decenas de millones de pasajeros a la semana. En América del Norte, solo el metro de Nueva York transporta más personas todos los días.
Sin embargo, el incidente no ocurrió en una de las líneas más antiguas, que han pasado por al menos dos grandes terremotos en los últimos 35 años. Más bien sucedió en la Línea 12, completada en octubre de 2012.