Según el Centro Nacional de Comunicaciones del Gobierno interino, las protestas se cifraron en 237 entre el lunes 28 de septiembre y el jueves 01 de octubre, en al menos 21 regiones del país. La represión de los cuerpos de seguridad del régimen de Nicolás Maduro no impidieron las manifestaciones espontaneas en casi toda Venezuela.
Los principales focos de protestas estuvieron en los estados Nueva Esparta, 44; Sucre, 30; Anzoátegui, 26; y Lara, 25, reseñaron en una nota de prensa.
El colapso de los servicios públicos, la escasez de alimentos y combustible fueron los detonantes principales de las manifestaciones. La respuesta del régimen ha sido atacar a quienes demuestran el descontento con su gestión. El CNC denuncia varias detenciones, ocurridas durante esas horas, especialmente en los estados Sucre, Cojedes, Nueva Esparta y Portuguesa, donde se realizaron múltiples allanamientos sin orden judicial.
- Servicios públicos en el abandono
La mayoría de las protestas se realizaron para exigir mejoras en los servicios de agua, luz y gas. En las denuncias, los ciudadanos argumentaban que tienen al menos dos o tres meses sin agua potable y gas doméstico.
La escasez de combustible ha sido otro detonante de las protestas de calle, llevadas a cabo en su mayoría por conductores durante las colas en las estaciones de servicios. Los ciudadanos han denunciado que permanecen varios días esperando surtir combustible, sin embargo, funcionarios del régimen cierran las gasolineras sin dar respuesta.
- Cierre de calles y pancartas
Los venezolanos se han organizado por comunidades para salir a las calles a expresar su descontento contra el régimen de Maduro. La modalidad más frecuente de protesta ha sido el cierre de vías y calles principales, así como el uso de consignas, banderas y pancartas alusivas a las denuncias, con el fin de llamar la atención de las autoridades y exigir una mejor calidad de vida.
Entre las exigencias más frecuentes se encuentra la salida de Maduro del poder. Con una inflación del 3.000%, según la Asamblea Nacional, en el país se ha instalado en una situación económica insostenible que ha acabado con el poder adquisitivo y la calidad de vida de los ciudadanos.