El anciano Edy Fuentes Mendoza, y su hermana Romelia viven en el poblado Yumurí, de Baracoa, sin techo y abandonados desde hace años por el régimen cubano.
En un video difundido por Cubanet, se muestran las condiciones infrahumanas en que habitan estas dos personas. El suelo está prácticamente sin terminar, las paredes muy débiles de madera, y hay huecos que los ponen en situaciones inseguras.
Edy contó a ese medio que los únicos ingresos que perciben son los 244 pesos cubanos (10 dólares) al mes por la pensión de su hermana. Sin embargo, ese monto no les alcanza para sus necesidad básicas.
"Nos alimentamos de lo que compra un primo", explicó.
Por su parte, Esther Camejo, presidenta del CDR de la zona, los ayuda en la que puede, pero confiesa que ha ha expuesto esta situación a la trabajadora social y a la delegada de la circunscripción y siguen sin tener respuestas a sus problemáticas.
"Vengo y les doy una mano. Baño a la señora. Cuento los problemas de ellos y han quedado en arreglarles la casa para poner una cuidadora pero nunca lo han hecho. La delegada dijo que iba a ver si hallaba un asilo, pero no han hallado parece y no hay atención para ellos. No tienen hornilla", lamentó Camejo.
Esta familia está sin techo desde el huracán Matthew en 2016 y el Estado no les da los materiales para reconstruirlo.
A finales de junio el diario estatal Vanguardia, perteneciente a la provincia de Villa Clara, reconoció a través de un artículo publicado en su sitio web la falta de atención a adultos mayores por parte de las instituciones del régimen.
"Existen irregularidades en cuanto al Sistema de Atención a la Familia (SAF) en Villa Clara, que deben ser erradicadas con el trabajo mancomunado de los Consejos de Administración Municipales", señaló el periódico. "La COVID-19 ha dejado muchas enseñanzas, sobre todo, en cosas que no hacíamos o dejábamos de hacer en cuanto a la atención a las personas más vulnerables; entre las cuales está el Sistema de Atención a la Familia (SAF)".
Según el informe presentado en el encuentro, existen en Villa Clara 8800 personas que forman parte del SAF, "pero a los Consejos de Administración Municipales les ha faltado control y seguimiento al tema, con listados desactualizados y datos incorrectos", lo que ha favorecido manifestaciones de robo de recursos y otras irregularidades, que han afectado directamente a estos grupos de personas vulnerables.
A esto hay que sumarle que la falta de voluntad política y de integralidad en su atención han provocado que muchos inmuebles se encuentren en situaciones pésimas y que existan Consejos Populares que no dispongan de este Sistema de Atención a la Familia.
Una encuesta realizada en la central provincia reveló que en no pocas ocasiones la calidad de la alimentación es mala, así como tampoco es buena su elaboración, y que de las 111 instituciones del Sistema de Atención a la Familia (SAF) existentes en el territorio, un total de 59 fueron evaluados de Bien (53,1 %); 40 de Regular (36,3 %) y 12 de Mal (10,8 %).