Los cubanos continúan denunciando la situación en la que viven en medio de la crisis económica por la que atraviesan el país desde hace ya varios meses, y que a pesar de la contingencia epidemiológica de la COVID-19, el régimen de los Castro parece no querer ayudarlo más allá de sus intereses.
En esta ocasión la denuncia la hizo Kiuver Castillo Alba a través de su perfil en la red social Facebook.
"No sé por qué desde que desperté en la madrugada sentía que haría una publicación contra el descaro y el robo al cual constantemente nos encontramos sometidos".
Y es que cada vez son más los cubanos que desde que tienen acceso a internet se atreven a denunciar los desmanes de la dictadura, ya sea a través de las redes sociales, blogs o páginas personal, o en los diferentes medios de comunicación independientes.
"¿Habrá alguien con suficiente moral para decirme hasta cuándo piensan estafar al pueblo?", se pregunta Kiuver Castillo y él mismo se da la respuesta: "No, no hay nadie. Porque todos los que tienen el deber de velar por esto, están viviendo calmados".
La indignación de este cubano se debe a que, como él mismo relata, compró una pequeña lata que a la hora de adquirirla indicaba que contenía filete de atún en aceite, pero cuando la abrió el contenido era lo más parecido a un picadillo de pescado.
"Esta latica de atún en aceite la he comprado en el Centro Comercial La Plaza (La Gran Piedra) con un costo de $ 8.80 CUC o lo que es lo mismo $ 220.00 CUP. ¿A quién le pagan para este lujo? A nadie. Pero una banda de estúpidos es lo que somos por seguir comprando esta mierda. Sí mierda porque decía la lata Filete de atún en aceite. ¿Pero que encontré al abrirla? Picadillo de pescado. Bueno, al menos eso parece. Porque filete nunca encontré".
Y como todo cubano residente en la isla, Kiuver Castillo conoce bien a lo que se puede enfrentar por haber hecho pública su inconformidad.
"Ya esta es para que vengan a decirme que cuidado con lo que escribo. Que me voy a buscar un problema. Que me van a sancionar y a botar del Gobierno y que no podré trabajar más", pero para como están las cosas, es evidente que ya nada de eso le preocupa.
"Pues sepan que me tiene sin cuidado todo y no pretendo eliminar, ni decir menos. Las cosas son tal cual las digo. El que sabe lo que vive soy yo", concluye, no sin antes darle un consejo al pueblo cubano:
"Ah! Que por poco lo olvido. Todos los que estén intentando comprar por el famoso tuenvio, le aconsejo no hacerlo, es otra gran estafa. Y si no lo creen pruébenlo y verán. Pero eso es otra incomodidad".