El banco Natwest, entidad subsidiaria del Royal Bank of Scotland (RBS), lanzó este miércoles la primera tarjeta de débito que requiere una huella dactilar en lugar del código pin para pagar en el Reino Unido.
Se trata de un programa piloto en el que participan 200 de sus clientes que, a partir de ahora, tendrán que presionar un sensor de la tarjeta que detecte su huella dactilar para compras superiores a 30 libras (34,69 euros), informó hoy el banco en una nota de prensa.
La tarjeta, dotada con tecnología biométrica, detecta en menos de un segundo la huella para verificar la identidad del propietario y consumar el pago.
Este sistema emplea tecnología "contactless", lo que permite operar en cajeros automáticos y pagar operaciones sin necesidad de introducir las tarjetas en el lector correspondiente.
En 2017, se registraron en el Reino Unido cerca de 5.600 millones de pagos a través del procedimiento "contactless", tanto de débito como de crédito, casi el doble que el año anterior, según un informe de la asociación bancaria británica UK Finance.
David Crawford, del equipo de Natwest que ha implementado la nueva tarjeta, señaló que se trata de la "mayor evolución en tecnología de tarjetas de los últimos años".
El proyecto piloto se ha desarrollado en colaboración con Visa y con la compañía franco-holandesa Gemalto, un vendedor de tarjetas inteligentes y otros productos de seguridad digital.
La empresa fue centro de la polémica el año pasado después de que el Gobierno de Theresa May le encargara la fabricación de los nuevos pasaportes del Reino Unido tras el "brexit", suprimiendo el contrato con la firma británica De La Rue.
Howard Berg, de Gemalto, manifestó que "utilizar la huella dactilar en lugar de un código pin para autorizar transacciones tiene muchas ventajas, en primer lugar, mejorar la seguridad".