La Paz, 13 sep (EFE).- Los incendios en la Amazonia, que siguen devorando hectáreas en Bolivia, han encendido el ambiente electoral en este país, que se alista para las elecciones programadas para octubre.
Los ataques a sedes del gubernamental MAS han caldeado los ánimos de los seguidores de los partidos en contienda, con acusaciones cruzadas entre oficialismo y oposición de estar instigados y de que intentan desviar la atención de los graves incendios que aún azotan al país sudamericano.
Los episodios de violencia se habían desatado días atrás, con enfrentamientos como un el pasado miércoles en una remota localidad rural del departamento de La Paz ante una sede del Movimiento al Socialismo (MAS), que derivó en el lanzamiento de cartuchos de dinamita y el incendio de una comisaría de Policía.
Pero los disturbios que más encendieron el ambiente político fueron los de este pasado jueves en Santa Cruz, la mayor ciudad de Bolivia y su capital económica, con destrozos en varias sedes del MAS.
Al menos ochenta personas pasaron la noche en comisaría, de las que unas doce fueron remitidas al Ministerio Fiscal y del resto la mayoría fueron liberadas este viernes, según la Policía Boliviana.
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El presidente del país, Evo Morales, calificó de golpistas a los violentos y los acusó de estar pagados desde la derecha opositora para conspirar contra la democracia en el país.
"Las elecciones no se ganan con bate, se ganan con voto. Las elecciones no se ganan con violencia, se gana con consciencia del pueblo boliviano", defendió durante un acto oficial.
Morales citó expresamente de estar detrás de esta violencia al 21-F, un movimiento crítico con su Gobierno.
El oficialismo cargó además contra el Comité Cívico Pro Santa Cruz, una entidad que aglutina organizaciones sociales cruceñas, críticas igualmente con el Gobierno, con acusaciones de que la violencia fue premeditada por estos colectivos.
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Los presidentes de las cámaras de Diputados, Víctor Borda, y de Senadores, Adriana Salvatierra, y miembros del Ejecutivo como el ministro de Gobierno (Interior), Carlos Romero, señalaron a estas organizaciones, si bien instaron a no responder a lo que calificaron de provocación de los opositores.
Por su parte, el principal candidato opositor para los comicios de octubre, el expresidente boliviano Carlos Mesa, condenó en Twitter "la violencia y la provocación venga de donde venga".
"Frente a los desastres tan graves como los incendios de la Chiquitania, lo que se requiere es unidad para detenerlos, y no generar enfrentamientos que buscan un beneficio político", alertó.
Evo Morales concurre por el MAS a un cuarto mandato en los comicios del próximo 20 octubre, frente a ocho candidaturas de la oposición entre los que solo parece Mesa, por la alianza Comunidad Ciudadana, con opciones a forzarle a una segunda vuelta, a tenor de los últimos sondeos.
(Con información de Efe)