“La grandeza de una nación y su progreso moral pueden ser medidos por el trato que reciben sus animales”, bajo esa premisa y frase célebre del líder indio Mahatma Gandhi, Brasil endurece las penas contra aquellos que aprovechándose de la inocencia de los animales, maltraten o abusen de ellos.
El presidente Jair Bolsonaro promulgó la ley con el objetivo de endurecer las sanciones a quienes cometan este delito. La firma del documento dejó enternecedoras imágenes, ya que después de estampar la rúbrica, su perro puso la huella en señal de aprobación.
La ley contempla una pena de hasta cinco años de prisión para quienes cometan algún tipo de abuso contra perros, gatos y otros animales. También una multa y la prohibición de volver a tener mascotas.
Kelly Barroso, presidenta de la organización no gubernamental Miau Aumigos, participó en la ceremonia y explicó que los actos de violencia “son una realidad” que debe ser castigada por la sociedad. Citó cálculos basados en el último censo, según los cuales hay 29 millones de domicilios con perros y más de 18 millones con gatos en todo Brasil, una nación con más de 209 millones de habitantes.
El primer mandatario, en principio, manifestó dudas respecto a la reglamentación, por lo que decidió someterlo a una encuesta: “Si la promulgo, me criticarán que la pena es muy alta. Si la veto, los animalistas me van a pegar también”, dijo en una transmisión en vivo que hizo junto a un youtuber de 10 años.