Amnistía Internacional (AI) denunció este jueves que las autoridades de Estados Unidos, México, Canadá, Curazao y Trinidad y Tobago detienen de forma peligrosa a migrantes y solicitantes de asilo, y exigió su liberación para evitar contagios de coronavirus.
"Para combatir con eficacia la COVID-19 en las Américas e impedir miles de muertes evitables, los Estados deben liberar rápidamente a las personas en detención migratoria y únicamente detener a las personas migrantes en circunstancias extraordinarias", señaló en un boletín Érika Guevara-Rosas, directora para las Américas de AI.
Además, la representante de la ONG pidió garantizar que los migrantes "tengan acceso, sin discriminación, a atención médica para salvar sus vidas".
ESTADOS UNIDOS
Estados Unidos cuenta con el sistema de detención migratoria más grande del mundo, con una población diaria promedio de casi 40.000 migrantes y solicitantes de asilo en más de 200 centros.
El 24 de marzo, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) anunció el primer caso confirmado de COVID-19 en estos centros.
Desde entonces, el ICE ha revelado que 33 miembros de su personal han contraído el virus, y se ha puesto en cuarentena a decenas de personas detenidas.
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"AI ha recibido testimonios perturbadores de personas detenidas sobre condiciones peligrosas en centros de detención", especialmente para quienes tienen problemas médicos preexistentes.
La ONG informó que la próxima semana emitirá un informe documentando como oficiales del DHS y de los centros del ICE no han adoptado las medidas adecuadas.
MÉXICO
Aunque el gobierno mexicano anunció que los centros de detención están al 45 % de su capacidad y siguen todas las recomendaciones sanitarias para prevenir la propagación de la COVID-19, AI reportó que algunos centros de detención migratoria están superpoblados.
"E incluso mezclan a niños y adolescentes con poblaciones adultas debido a la falta de espacio", apuntó la ONG.
"Las personas detenidas aún corren un grave riesgo ante cualquier brote del virus, y la respuesta de las autoridades ha sido insuficiente", destacó la organización, subrayando que a mediados de marzo había 3.059 personas migrantes detenidas en situación irregular.
CANADÁ
Amnistía Internacional escribió a finales de marzo al gobierno canadiense para expresarle que hace "esfuerzos insuficientes" para evitar que la COVID-19 se propague entre migrantes en lugares de detención, donde las tasas de mortalidad son a veces superiores a las de estos mismos centros de Estados Unidos.
Las autoridades migratorias canadienses "únicamente deben tener personas detenidas en las circunstancias más excepcionales y deberían en general poner fin a las detenciones migratorias", apuntó la ONG.