A inicios de 2019 fue noticia el proyecto del régimen de los Castro de sembrar café en los llanos del país, tras celebrarse un taller nacional del que salió la idea de incorporar 10 provincias a esta nueva modalidad de cosecha.
Ya una idea similar a esta fue un fracaso en los años 60 del pasado siglo cuando a Fidel Castro se le ocurrió deforestar las tierras alrededor de La Habana y sembrarlas de café, muy a pesar de saberse de que este cultivo es propio de zonas montañosas.
Luego de un año de que se reciclara esta idea, el proyecto de sembrar café en el llano vuelve a ser noticia en el diario Granma, el cual la promociona como una "valiosa alternativa" y como una "significativa contribución a la sustitución de importación del grano destinado al consumo nacional".
Para entender esto hay que tener en cuenta que solo en 2019, según datos del Ministerio de la Agricultura de Cuba, la importación de este producto alcanzó las 8 000 toneladas, algo bochornoso para un país que en 1958 no importaba café y alcanzó una producción de más de 50 000 toneladas.
En su texto el periódico del Partido Comunista de Cuba da especial significado a palabras expresadas recientemente por el primer ministro cubano, Manuel Marrero Cruz, quien aplaudió el hecho de que Santiago de Cuba haya comenzado a sembrar café en los llanos, a pesar de que la medida del Estado cubano para fomentar esta producción está dirigida fundamentalmente al occidente del país.
Marrero Cruz se refirió a esto luego de un recorrido por los terrenos de esa provincia oriental donde se intercalan jóvenes cafetos con otros cultivos.
Se trata de un proyecto de la dirección de la provincia creado a finales de 2019 y denominado polígonos agropecuarios "Revolución", donde se pretende, además de café, producir hortalizas, viandas, granos y carnes, destinados a la elaboración de alimentos, con cero empleo de combustible fósil y un mínimo de materias primas importadas.
La producción cafetalera de Cuba se desarrolla fundamentalmente en nueve de sus provincias: Guantánamo, Santiago de Cuba, Granma y Holguín producen el 90 % del café nacional, siendo Santiago de Cuba la mayor productora, de ahí que las autoridades de esta provincia hayan decidido probar sumarse a la puesta en práctica de esta nueva idea.