La Unión Europea (UE) eludió tratar este lunes al opositor venezolano Juan Guaidó como "presidente encargado", y reitero que la "única salida" a la crisis en Venezuela pasa por retomar las negociaciones políticas y establecer un proceso de transición que conduzca a unas elecciones "creíbles, inclusivas y democráticas".
En unas conclusiones pactadas por los Veintisiete, aseguraron que Guaidó y los diputados de la Asamblea Nacional (legítima) son “importantes actores e interlocutores privilegiados" en el contexto venezolano. En este sentido, ha pedido a la oposición que adopte una "posición común para un proceso inclusivo de diálogo y negociación”.
“Ante esta desafiante coyuntura, todos los líderes venezolanos tienen que priorizar los intereses de la población venezolana”, indicó el documento, que apunta a que la diplomacia europea está preparada para apoyar este proceso, incluyendo la opción de enviar misiones electorales. La UE sostiene que necesitan "compromisos difíciles" para lograr que la transición llegue a buen puerto.
Sobre las elecciones legislativas de diciembre, los Veintisiete han lamentado la "oportunidad perdida" para la democracia en el país, al no cumplir con los estándares mínimos e insisten en el no reconocimiento del proceso ni de la Asamblea Nacional constituida en enero.
El bloque europeo ha denunciado que las acciones de las autoridades del dictador Nicolás Maduro han reducido significativamente el espacio democrático en el país y han dañado una resolución de la profunda crisis en el país.
Ante el deterioro de la situación humanitaria en el país, subrayó que se deben respetar los Derechos Humanos ya que no habrá una salida a la crisis si los ciudadanos "son detenidos y perseguidos por ejercer sus derechos y libertades fundamentales".
La UE califica a la Asamblea Nacional (legítima) como "saliente", puesto que terminó su mandato el 6 de diciembre, tal y como indica la Constitución, pero Guaidó mantiene que la Cámara continúa bajo su mandato, aún sin haberse votado ni sometido a consulta.
Al no ser reconocido como legislador, pierde también su cargo como presidente de la AN, puesto clave que le sirvió para proclamarse "presidente interino" el 23 de enero de 2019 con una lectura personal de la legislación que le permitiría serlo por 30 días.
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Pese a ello, el grupo opositor que lidera Guaidó anunció la prolongación, por un año, de las funciones de los diputados antichavistas, bajo la figura de la Comisión Delegada, una instancia contemplada en la Constitución, pero sólo para operar durante los períodos vacacionales de los diputados.
El bloque comunitario reiteró en su comunicado el rechazo a las elecciones del 6 de diciembre porque "no cumplieron con los estándares internacionales para un proceso creíble" y "hubo falta de pluralismo político", por lo que lamentó "profundamente" que la Asamblea Nacional asumiera ayer su mandato "sobre la base de estas elecciones no democráticas".
