Cabo Verde autorizó que el empresario colombiano Alex Saab, conocido por ser el testaferro de Nicolás Maduro y cuya extradición pide Estados Unidos, sea trasladado a Praia para recibir atención médica especializada.
El Tribunal de Apelación de Barlavento de Cabo Verde permitió que Saab evacuara la isla de Sal, donde se encuentra detenido desde junio de 2020 a petición de Estados Unidos, a la capital del país por motivos de salud, confirmó la agencia de noticias EFE.
Hasta el momento, no se ha confirmado una fecha de trasladado. “Esto se está discutiendo con las autoridades locales y se espera que sea lo antes posible”, aclaró el equipo legal de Saab.
“Hay importantes problemas logísticos que deben finalizarse, pero esperamos que se resuelvan rápidamente”, agregaron.
El equipo del empresario afirma que Saab tiene 448 días sin ser atendido por médicos especializados, por lo que su salud ha deteriorado significativamente, ya que “sufre de cáncer, diabetes, hipertensión y problemas relacionados con el corazón”.
“Praia, al ser la capital, tiene una gama más amplia de especializaciones, pero incluso estas no alcanzan lo que se requiere”, dijeron las fuentes mientras aseguran que la prioridad de Saab es poder traer expertos médicos en temas oncológicos a Cabo Verde.
El Comité de Derechos Humanos de la ONU había ordenado el pasado mes de junio que se le concediera al colombiano acceso sin restricciones a la atención médica especializada y que se detuviera cualquier proceso de extradición a Estados Unidos.
Saab fue detenido el 12 de junio de 2020 como petición de Estados Unidos por presuntos delitos de lavado de dinero cuando su avión hizo escala en el Aeropuerto Internacional Amilcar Cabral de la isla de Sal.
Luego de su detención, Venezuela indicó que Saab era un ciudadano venezolano y un “agente” del Gobierno que estaba de paso por Cabo Verde, por lo que sus abogados argumentan que “tiene derecho a protección personal como enviado especial de Venezuela”.
Saab fue conocido por los medios cuando la ex fiscal venezolana, Luisa Ortega Díaz, lo acusó en 2017 de ser uno de los testaferros del régimen venezolano.
