No fueron 5 millones de dólares, sino 38 millones los que se habrían defraudado de la estatal PDVSA por parte del exembajador de España en Caracas, Raúl Morodo, su hijo Alejo, y dos socios venezolanos, reportó el domingo 19 el portal Infobae.
Morodo fue embajador en Venezuela durante el mandato del izquierdista José Luis Rodríguez Zapatero, en la época en que el chavismo ganaba fuerza con Hugo Chávez como presidente del país sudamericano.
Infobae, que retomó un reportaje del diario español El Mundo, dijo que Morodo y el resto de implicados se apropiaron, presuntamente, de la cantidad señalada y la introdujeron en España a través de cuentas bancarias en Suiza y Panamá.
Previamente se calculaba que el monto de lo defraudado era de 5 millones de dólares, pero la Fiscalía Anticurrupción de España investiga una cifra mucho mayor, que alcanza los 38 millones de dólares, detalló el portal.
Uno de los socios venezolanos era Juan Carlos Cabrera Marques, exdirector de PDVSA, quien se ahorcó después de declarar ante el juez en julio del año pasado.
Según la investigación, el dinero lo fueron lavando mediante contratos ficticios y facturas falsas y lo ingresaron a territorio español en trasferencias desde Suiza y Panamá para la compra de inmuebles de lujo.
Al exjefe diplomático y los otros implicados se les atribuye el delito de blanqueo de dinero procedente de corrupción en las transacciones comerciales internacionales, así como falsedad documental y delito fiscal, por hechos ocurridos entre los años 2012 y 2015, según el reporte de Infobae.
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El caso tiene relación con el saqueo de la petrolera estatal venezolana que se investiga en varios juzgados españoles y en otros dos países europeos (Portugal, Andorra), además de Estados Unidos.
En esas naciones se investiga a decenas de ciudadanos venezolanos por lavar cientos de millones de dólares obtenidos de sobornos cuando ostentaban cargos en empresas públicas bajo la presidencia de Chávez, acotó Infobae.
Solo en España la justicia persigue a una veintena de ellos. Otro país que tiene bajo la lupa a estos funcionarios corruptos es Andorra, donde una juez procesó a antiguos altos cargos de PDVSA, por un presunto expolio de 2.000 millones de dólares a la compañía.
Los desvíos de PDVSA, que se considera el mayor caso de corrupción que se ha hecho público del gobierno chavista, se investigan también en Venezuela y casi un centenar de funcionarios de la empresa pública, entre ellos dos exministros y directivos de varias filiales, han sido detenidos o están siendo buscados.