Estados Unidos condenó este martes el lanzamiento de misiles por parte del régimen de Kim Jong-un, calificando la acción como una “amenaza y un acto desestabilizador” para el equilibrio geopolítico de la zona.
“Estados Unidos condena estas acciones y pide a la República Popular Democrática de Corea que se abstenga de realizar nuevos actos desestabilizadores”, indica un comunicado del Comando del Indo-Pacífico de Estados Unidos (USINDOPACOM, por sus siglas en inglés).
“Somos conscientes del lanzamiento de misiles balísticos de Corea del Norte ocurrido esta mañana en el mar japonés y estamos consultando estrechamente con la República de Corea y Japón, así como con otros aliados y socios regionales”, continúa la nota.
El USINDOPACOM también indica que, aunque no se ha evaluado completamente la prueba de lanzamientos llevada a cabo por Corea del Norte, esta “no representa una amenaza inmediata para el personal, el territorio de Estados Unidos o el territorio de nuestros aliados”.
El Comando aseguró que continuaría monitoreando la zona y que el compromiso de Estados Unidos con la defensa de Corea del Norte y Japón sigue firme.
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Corea del Norte disparó este martes al menos un misil balístico en el mar de Japón, también conocido como el mar del Este, según confirmó el Estado Mayor surcoreano y el Gobierno Japonés.
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur indicó que Pyongyang lanzó el misil submarino a las 10:17 horas (hora local) y que el acto se llevó a cabo desde un lugar cercano a Sinpo, en la provincia norcoreana de Hamgyong del Sur, según recoge la agencia surcoreana Yonhap.
Esta acción supone la quinta prueba de armamento en menos de dos meses, por lo que las autoridades de inteligencia de Corea del Sur y Estados Unidos están haciendo “un análisis exhaustivo para obtener más información”, señaló el Ejército surcoreano.
Por su parte, el primer ministro japonés, Fumio Kishida, aseguró que Corea del Norte disparó dos misiles balísticos sin informes de daño y no un misil como confirmaron.
Las autoridades japonesas coincidieron con la información suministrada por Corea del Sur sobre la hora y el lugar desde el que se ha producido el lanzamiento, que Kishida calificó de “extremadamente lamentable”.
La prueba norcoreana tuvo lugar el mismo día en que se ha inaugurado en Seúl, capital de Corea del Sur, la feria internacional para la industria aeroespacial y de defensa ADEX, que contó con la presencia de la directora de inteligencia nacional estadounidense, Avril Haines.
