El exalcalde de Nueva York y aspirante a la candidatura demócrata para las elecciones presidenciales de este 2020 en Estados Unidos, Mike Bloomberg, dio a conocer esta semana su plan de reforma migratoria, el cual constituye una ruptura total con las políticas restrictivas y de persecución llevadas a cabo por el actual inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump.
Como había anunciado el multimillonario, su plan incluye una vía hacia la ciudadanía para millones de indocumentados y acabará con la práctica de la separación familiar en la frontera y la prohibición de ingreso para ciudadanos provenientes de países de mayoría musulmana.
Como refiere Univisión Noticias, aunque Bloomberg no explica cómo lo hará ni qué acuerdo intentará alcanzar con los republicanos para conseguir el respaldo bipartidista en ambas cámaras del Congreso, promete en su plan terminar con la actual política migratoria de tolerancia cero que promueve otro multimillonario, el actual presidente de Estados Unidos.
Asimismo, sostiene que “iniciará una investigación para esclarecer los abusos cometidos en los últimos tres años por las agencias generales de inmigración, entre ellas la Patrulla Fronteriza y la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), cabeza de la fuerza nacional de deportaciones de Trump”.
Bloomberg también anticipa que, de llegar a la presidencia y poder instrumentar su plan, reestablecerá el programa y la cuota de refugiados en el mismo punto en el que lo dejó Obama al ceder la presidencia a Trump.
Su idea es hacer que “la inmigración funcione para la economía y las comunidades de Estados Unidos”. Para ello su plan busca modernizar un sistema de inmigración que está “roto” por culpa de las políticas del actual jefe del Ejecutivo estadounidense.
En palabras del magnate, “pondrá fin a las prácticas inhumanas defendidas por el presidente Trump”, “ineficaces, derrochadoras y crueles, como separar familias y enjaular a los niños”.
“La demonización que el presidente ha hecho hacia los inmigrantes y su avivamiento del miedo y el odio, son un capítulo feo en la historia estadounidense que debemos cerrar", apuntó Bloomberg en la presentación de su plan, donde además subrayó que “la inmigración no amenaza a Estados Unidos”, sino que “lo fortalece”.
En líneas generales, y citando el resumen de Univisión, el plan de Bloomberg buscará terminar con la prohibición de viaje expandida recientemente por Trump y con la separación familiar; promover alternativas a la detención para las personas que no representan una amenaza para la seguridad pública; proteger a los dreamers y los beneficiarios del TPS; restaurar la puntualidad en el proceso de asilo; ordenar al Departamento de Justicia que investigue el abuso en ICE y CBP, y reformar las agencias para garantizar la supervisión y la rendición de cuentas; y restablecer el reasentamiento de refugiados en 125 mil por año.
Pese a tal plan repleto de buenas intenciones en materia migratoria, lo cierto es que las posibilidades de Bloomberg de llegar a la Casa Blanca en este momento resultan escasas. No aparece entre los primeros precandidatos demócratas en las encuestas, y en los dos primeros caucus de su partido prácticamente no ha figurado.
Según declaró recientemente, esperará al súper martes (3 de marzo), el día con mayor número de estados en elecciones primarias, para valorar sus posibilidades reales de disputarle la presidencia al magnate republicano, al cual muchos ven por otros cuatro años sentado en el Despacho Oval.
