El Parlamento Europeo confirmó este jueves el reconocimiento de Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela y respaldó una solución pacífica a través de elecciones presidenciales libres, transparentes y creíbles.
Con 310 votos contra 120 y 152 abstenciones, el plenario aprobó la segunda resolución este año sobre Venezuela, la décima desde el comienzo de la actual legislatura.
Los eurodiputados condenan la "feroz represión y violencia" y reiteran su profunda preocupación por la crisis política y humanitaria sin precedentes en el país.
El texto señala que Venezuela se enfrenta a una escasez de medicamentos y alimentos, violaciones masivas de derechos humanos, hiperinflación, opresión política, corrupción y violencia. La pobreza ha llegado al 87% de la población y millones de venezolanos han huido del país, agrega. Los eurodiputados también se refieren a los recientes cortes de electricidad, que han agravado la ya dramática crisis sanitaria.
La Cámara confirma que reconoce a Juan Guaidó como el legítimo presidente interino de Venezuela y expresa su pleno apoyo a su hoja de ruta, es decir, poner fin a los reclamos ilegítimos al poder, establecer un gobierno de transición nacional y celebrar elecciones presidenciales anticipadas. Los eurodiputados piden a los Estados miembros de la UE que aún no han reconocido a Guaidó que lo hagan con urgencia.
El Parlamento hace un llamado al "régimen ilegal de Maduro" para detener el hostigamiento, las detenciones y todas las formas de represión contra periodistas, líderes políticos y miembros del equipo de Juan Guaidó, incluido su jefe de gabinete, Roberto Marrero.
Los eurodiputados denuncian que el mes pasado, a pesar de que el limitado suministro de alimentos en Venezuela estaba en riesgo de ser echado a perder, la ayuda humanitaria ofrecida por Colombia y Brasil fue ferozmente rechazada y, en algunos casos, destruida por el régimen.
La resolución también apunta al aumento de la crisis migratoria en toda la región, reconociendo los esfuerzos y la solidaridad mostrados por los países vecinos. Los eurodiputados exigen que la Comisión Europea continúe cooperando con estos países, no solo proporcionando asistencia humanitaria, sino también ofreciendo más recursos.
Finalmente, el Parlamento solicita sanciones adicionales de la UE dirigidas a los activos de las autoridades estatales ilegítimas en el extranjero y a los individuos responsables de violaciones a los derechos humanos y represión. Sugiere prohibiciones de visa para estas personas, así como a sus parientes más cercanos.