El presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció el martes la ilegalidad de un nuevo financiamiento de la filial de la estatal de PDVSA en Estados Unidos, Citgo, tras acusar al congreso del país sudamericano y a Washington de apoyar la operación.
La filial de la petrolera venezolana, que enfrentará pronto compromisos de pagos del bono PDVSA 2020, informó en marzo que consiguió un préstamo de 1.200 millones de dólares a cinco años que le permitirá cubrir gastos operativos y refinanciar deuda, tras separarse de su matriz debido a las sanciones impuestas por Washington al país sudamericano.
“Aprovecho la oportunidad para denunciar el robo de Citgo a través de un endeudamiento totalmente ilegal y así se va a demostrar cuando ganemos los juicios en Estados Unidos y se nos devuelva la empresa Citgo, a propiedad del Estado venezolano”, dijo Maduro en una reunión en su despacho transmitida por el canal estatal de televisión.
“Se va a demostrar y van a quedar guindados todos los involucrados, venezolanos y extranjeros, en este robo y desfalco de Citgo que está en pleno desarrollo”, agregó, sin dar detalles sobre el financiamiento.
Citgo Petroleum está dirigida por una junta directiva bajo el mando de Luisa Palacios, quien fue designada por la Asamblea Nacional, de mayoría opositora.
El congreso espera revisar en los próximos días el pago de los intereses del bono PDVSA 2020, para proteger a Citgo, dijeron legisladores y un miembro de la junta de administradora transitoria de la petrolera.
Desde que el jefe de la Asamblea Nacional venezolana, Juan Guaidó, invocó la Constitución para asumir una presidencia interina en enero y fue reconocido por 50 países, ha habido una batalla por el control de Citgo, el activo más grande de Venezuela en el extranjero, valorado entre 8.000 millones y 13.000 millones de dólares.