En Miami Beach, Florida, se declaró este sábado 20 de marzo un toque de queda de emergencia de 8:00 de la noche a 6:00 de la mañana y con efecto inmediato. En conferencia de prensa, las autoridades culparon a las enormes multitudes fuera de control relacionadas con el "Spring Break".
De acuerdo a un reporte de Associated Press, citado por AméricaTevé, el toque de queda entra en vigor esta noche en South Beach, uno de los sitios de Estados Unidos más concurridos durante las fiestas de vacaciones de primavera.
La medida fue impuesta, según señalaron las autoridades, porque los juerguistas de esta temporada del Spring Break, “causaron destrozos en restaurantes, protagonizaron trifulcas en las calles y miles de ellos se reunieron sin usar mascarillas ni mantener el distanciamiento social”, publicó AP.
A los turistas y huéspedes de hoteles de Miami Beach se les pidió mantenerse en interiores durante el toque de queda.
Raúl Águila, administrador interino de la ciudad, declaró al Miami Herald que aunque se desconoce cuánto tiempo permanecerá en vigor el toque de queda, recomienda mantener la medida al menos hasta el 12 de abril.
“Estas multitudes son de miles de personas”, dijo Águila. “Estamos al tope”,añadió.
En un comunicado difundido por la ciudad, Águila, refirió además, que a peatones ni vehículos se les permitirá el ingreso a las áreas restringidas después de las 8:00 p.m. y todos los establecimientos de la zona deberán estar cerrados a esa hora.
Las autoridades locales y los negocios han estado implementando alternativas en las atención al público para mantener los servicios activos, atraer a los turistas e impulsar a la economía, pero de un modo segura en medio de la pandemia de la Covid-19.
Ya en todo el condado se encontraba vigente un toque de queda que iniciaba a la media noche, con el objetivo de frenar la propagación del coronavirus.
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La temporada de Spring Break comenzó en Miami Beach el pasado 14 de marzo, la fiesta en plena pandemia de coronavirus estuvo fuera de control, por lo que la policía intervino y arrestó al menos a 30 personas, según fuentes oficiales.
Autoridades reforzaron la seguridad en las calles de la ciudad, en medio de las vacaciones de primavera, momento en que las playas del sur de la Florida se llenan de turistas. El peligro de contraer la COVID-19 no disuadió a cientos de personas que se aglomeraron en las cercanías de la céntrica calle Ocean Drive, mientras el estado reporta un promedio diario cercano a los 5000 contagios, según Infobae.
El portavoz de la Policía de Miami Beach, Ernesto Rodríguez, dijo el lunes día 16, a Efe que la semana que terminó este domingo fue una de las "más activas" para la institución con 163 arrestos, 69 de ellos por cargos criminales, el decomiso de 21 pistolas, y más de 1.500 infracciones de tránsito por conducción "insegura".
Subrayó que "el mensaje es claro" para aquellas personas que quieren incitar a la violencia: no vengan si no se van a comportar como en su casa, porque serán arrestadas.