El economista cubano Omar Everleny Pérez Villanueva ha publicado en IPS Cuba un extenso análisis en el que propone 10 medidas concretas para salvar la economía cubana.
Everleny recuerda que “las autoridades cubanas plantearon el pasado 27 de junio que vendrán en las próximas semanas o meses, más de 30 medidas económicas que romperían el bloqueo interno”, y aprovecha para hacer una propuesta al gobierno, insistiéndole en que la prioridad es incrementar la producción
“La interrogante es si se trata de más medidas de control o estarían dirigidas a incrementar producciones de bienes o servicios” --cuestiona.
"Lo que tal vez no quieren entender los directivos es que siempre hay un tiempo político y ese tiempo apremia en Cuba. Por ende se necesita una fuerte inyección que permita ofrecer resultados concretos, no esfuerzos", prosigue el académico, expulsado hace tres años del Centro de Estudios de la Economía Cubana de la Universidad de La Habana por "hablar con la prensa extranjera, dar algunas conferencias o participar en encuentros con personas".
"Las exhortaciones y los eslóganes fueron parte esencial de un tiempo pasado, y se puede decir con resultados satisfactorios, pero el contexto actual es otro, por ende las medidas a aplicar deben ser diferentes, más concretas, medibles y con esperanzas para el corto plazo", asegura el economista, antes de analizar algunos de los principales indicadores económicos, que, en su opinión, "revelarían "las urgencias a la que está sometido el gobierno cubano actual".
Las que siguen son las diez propuestas de medidas que, según el economista cubano, podrían dar oxígeno a la población y estimular a esas fuerzas productivas inactivas que existen:
- Ampliar la lista de los oficios aprobados para ejercer por cuenta propia, o definir una lista de actividades que no se podrían ejercer privadamente, y dejar a la iniciativa de la población las actividades que quisieran ejercer por su cuenta.
- Crear mercados de insumos mayoristas con empresas extranjeras o firmas comerciales extranjeras para todas las formas de propiedad incluyendo el estado. Eso evitaría la salida de divisas extranjeras para comprar insumos en el exterior.
- Quitarle el gravamen estatal al dólar de Estados Unidos, donde la cotización CUC (moneda divisa de circulación nacional) y USD (dólares estadounidenses) estén a la par, lo que motivaría que parte de las remesas que recibe la población se cambien en CADECA, o en Bancos, etc. Ya se especula que el cuc se está cotizando a 1.05 por un usd. Es decir ante una fragilidad financiera se tiende a atesorar en usd.
- Estimular los depósitos en usd en los bancos, a través de un estímulo en las tasas de interés bancarias.
- Crear zonas económicas especiales para compras de ciudadanos cubanos en el territorio nacional con tasas de ganancias aceptables, por ejemplo un 50 por ciento sobre el costo de la mercancía adquirida, no un 240 o un 300 ciento. Eso permite una mayor rotación del dinero. Como el país carece de divisas, ese mercado funcionaria en dólares de Estados Unidos. Pero el Estado gana, no pierde, y la población mejora su poder adquisitivo después que ha recibido aumentos de salarios. No se entiende como otros países ganan con la situación económica interna cubana y las autoridades se dedican solo a controlar, en vez de ser proactivos.
- La Ley de Empresas, la Ley de Cooperativas son leyes necesarias para la legitimación de todas las formas de propiedad. Se desconoce si se está pensando con fechas concretas o han sido solo anuncios.
- ¿Qué se necesita para la implementación de las micro, pequeñas y medianas empresas, si son posibles, ya que están refrendadas en los documentos que regirán la vida económica de Cuba a futuro? ¿Cuál es la demora o el temor?
- Sería atractivo aprobar empresas exportadoras o importadoras que permitan que las formas no estatales canalicen sus insumos o sus ventas a través de las mismas. Y en consecuencia permitir que las mayores empresas estatales salgan a comprar al exterior los bienes y productos que necesitan. Es decir suavizar el monopolio estatal del comercio exterior (pocas empresas) sólo debe ser válido para las compras masivas del estado cubano como alimentos y energéticos, entre otros.
- Los empresarios extranjeros verían con muy buenos ojos la eliminación de la agencia empleadora para las entidades extranjeras, es decir permitir la contratación directa y cobrar los impuestos a los salarios que devengan los trabajadores que sean contratados. Esa es una de las primeras preocupaciones para los inversionistas extranjeros en el país.
- Propondría mayor proactividad en la búsqueda de capitales externos provenientes de individuos o familias cubanas que residen en el exterior. No basta con una ley, y eso lo saben las autoridades cubanas. Tal como se hacen exposiciones para anunciar las carteras de oportunidades de inversión a entidades foráneas, se podrían hacer acciones a través de la oficina de cubanos residentes en el exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores.
"No son estas las únicas medidas posibles a estudiarse. Podría haber numerosas iniciativas, pero lo seguro es que algunas de estas propuestas conducirían a mejorar los desequilibrios existentes", concluye el economista, que fue uno de los 20 especialistas convocados a principios del 2013 por el zar económico Marino Murillo, para que convirtieran en políticas los llamados Lineamientos trazados por el VI Congreso del Partido Comunista en 2011 con el fin de "actualizar" el estancado modelo económico.
Pérez Villanueva también participó con otros cinco expertos en la revisión de la Ley de Inversión Extranjera de 1995. La nueva legislación, que entró en vigor en junio de 2014, incluía cambios dirigidos a atraer la inversión extranjera directa, como permitir a las compañías extranjeras que se establecieran en la Zona Especial de Desarrollo Mariel con el 100% de propiedad de sus negocios y darles un período de gracia de ocho años sin pagar impuestos, así como otros incentivos.