La subsecretaria del Departamento de Estado, Julie Chung, criticó este 26 de julio al presidente y el canciller cubanos, Miguel Díaz-Canel y Bruno Rodríguez, por mentir acerca de las protestas en Cuba.
“Mientras la policía del régimen hacía el trabajo sucio, Díaz-Canel y Bruno Rodríguez salieron en la televisión a mentirle al mundo sobre lo que realmente estaba pasando en Cuba. Gracias a cientos de cubanos armados con nada más que un teléfono celular: el mundo vio la verdad el 11 de julio”, declaró en redes sociales.
Según Chung, la verdad de los cubanos fue “muy poderosa”, por lo que el régimen de la isla decidió cortar el acceso a internet. Aun así, con el paso de los días la evidencia de la represión desatada contra los manifestantes salió a la luz.
Ambos políticos han sido cuestionados por la sociedad civil independiente y la comunidad internacional debido a la represión del levantamiento popular que comenzó en Cuba el pasado 11 de julio y se extendió a más de 60 localidades por varios días.
Díaz-Canel compareció ese mismo día ante la televisión local e incitó a sus seguidores a enfrentar con violencia el estallido social. Al mismo tiempo, calificó de “mercenarios pagados por EE. UU.” a los manifestantes, si bien concedió que algunos eran “revolucionarios confundidos”.
Rodríguez, por su parte, dijo que en Cuba no habían desaparecidos ni se había utilizado violencia contra los manifestantes.
Cubalex, organización independiente que brinda asesoría legal en la isla, suma más de 600 personas desaparecidas. Medios independientes han reportado la represión contra los manifestantes, que incluye golpizas y el uso de armas de fuego.
Hasta el momento, el gobierno cubano solo ha reconocido la muerte de una persona, Diubis Laurencio Tejeda, de 36 años y residente en el municipio de Arroyo Naranjo, de quien la nota oficial no se da las causas del deceso.
Denuncias en las redes sociales hablan de más muertos y heridos, aunque la información no ha sido confirmada.
El pasado 16 de julio, la alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, exigió al régimen cubano la liberación de todos los manifestantes detenidos durante las protestas y apostó por el inicio de un proceso de diálogo.
Varios gobiernos han condenado la represión en la isla y exigido al gobierno cubano que respete el derecho a la libre manifestación. Entre ellos los de Alemania, Canadá, Uruguay, Portugal.
Estados Unidos declaró públicamente que la represión era inadmisible. Un día después, el presidente Joe Biden dijo que revisaría su política hacia Cuba a raíz de estos sucesos.
