El reconocido bailarín y coreógrafo cubano Carlos Acosta interrumpirá este fin de semana su retiro de los escenarios para bailar dos piezas incluidas en la temporada "Evolución", con la que su compañía Acosta Danza celebra los 500 años que La Habana cumplirá el próximo noviembre.
Acosta, primer bailarín de raza negra en interpretar grandes papeles clásicos en las principales compañías del mundo, bailará "Mermaid", del belga Sidi Larbi Cherkaoui y "Rooster", obra del británico Christopher Bruce que recrea, con música de The Rolling Stones, el ambiente de alegría del Londres de los sesenta.
El emblemático Gran Teatro de La Habana "Alicia Alonso" será la sede de "Evolución", que incluye además "Fauno", de Cherkaoui; "Paysage, soudain, la nuit", del sueco Pontus Lidberg; y Satori, del joven bailarín Raúl Reinoso, estrenadas anteriormente con gran acogida del público habanero.
Acosta Danza continuará sus presentaciones en el Gran Teatro los días 27, 28 y 29 de septiembre, dentro de un calendario de festejos por los 500 años de La Habana que comenzó a finales de 2018 y se extenderá más allá del 16 de noviembre, la fecha oficial de fundación de la antigua villa de San Cristóbal de La Habana.
Conocido como el "dios negro del ballet cubano", Acosta (La Habana, 1973) es uno de los bailarines cubanos de mayor fama internacional.
Hasta hace poco su nombre resonó como posible candidato para continuar la obra de la legendaria Alicia Alonso, a punto de cumplir 99 años, al frente del Ballet Nacional de Cuba (BNC), responsabilidad que todo parece indicar recaerá en la actual subdirectora del BNC, la celebrada bailarina Viengsay Valdés.
En 2015 regresó a Cuba para fundar Acosta Danza tras dejar el Royal Ballet de Londres, donde fue primer bailarín entre 1998 y 2003, y desde entonces ha dejado su marca en la escena cubana con un estilo ecléctico, con tendencia a lo contemporáneo pero sin abandonar las raíces clásicas.
El filme biográfico "Yuli", en el que Acosta se interpreta a si mismo, fue recibido con ovaciones en el pasado Festival Internacional de Cine de La Habana, al que asistieron el bailarín, la directora de la cinta, la española Icíar Bollaín, y el guionista Paul Laverty, premio al Mejor Guion en el Festival de San Sebastián.