El Consejo Europeo anunció este jueves 12 de noviembre la decisión de extender hasta noviembre de 2021 las sanciones contra Venezuela, que afectan a 36 altos cargos del régimen de Nicolás Maduro “a raíz de la continuada crisis política, económica, social y humanitaria”.
La Unión Europea señaló que a esa situación se añaden “acciones persistentes contra la democracia, el estado de derecho y el respeto por los derechos humanos”. Las sanciones incluyen un embargo de armas, por la falta de avances democráticos en el país y la reiteración de violaciones de Derechos fundamentales.
Las sanciones cuya aplicación se extendieron hasta el 14 de noviembre del próximo año, son medidas coercitivas que el bloque ha ido sumando al primer paquete de sanciones de 2017, cuando las medidas se ciñeron a un embargo de armas y equipos que pudieran ser empleados para vigilar o reprimir a la población.
La decisión de extender las sanciones será publicada en la edición del viernes del diario oficial de la Unión Europea.
Desde el 2017, el bloque impulsó cuatro rondas de sanciones que prohíben la entrada en la UE y congelan los activos de un total de 36 altos cargos venezolanos, políticos y militares, entre ellos el número dos del 'chavismo' y presidente de la Asamblea Constituyente, Diosdado Cabello.
Entre otras figuras como los vicepresidentes Tareck El Aissami y Delcy Rodríguez; el fiscal general, Tarek William Saab; y el presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Maikel Moreno.
“Estas medidas están destinadas a ayudar a impulsar soluciones democráticas, con el fin de lograr estabilidad política al país y permitirle atender las necesidades apremiantes de la población”, señaló el Consejo en una nota
En la última actualización del listado realizada el pasado mes de junio, la UE incluyó once nuevos nombres, entre los que se encuentra el presidente electo "de forma ilegal", de la Asamblea Nacional, Luis Eduardo Parra.
A inicios de octubre, la Unión Europea declinó enviar una misión de observación a las elecciones previstas en Venezuela para el 6 de diciembre.
El consejo alegó que no habría tiempo de preparar una misión de observación y trató, así como de convencer al régimen de Nicolás Maduro de postergar las elecciones por un plazo de cinco a seis meses.
La UE no aceptó el resultado de las elecciones que marcaron la reelección de Nicolás Maduro, en 2018, y solamente reconoce la autoridad de la Asamblea Nacional, conducida por el presidente interino, Juan Guaidó.
Un diplomático europeo adelantó en octubre que si Venezuela insistía en realizar las elecciones del 6 de diciembre, la UE “no reconocerá ninguna institución, ni la Asamblea Nacional ni la Suprema Corte”.
Para el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, el régimen de Maduro carece de “legitimidad democrática”.